Vitoria - El conductor que pilotaba el autobús de línea foral que el pasado lunes atropelló a un peatón de 77 años y acabó con su vida, dio positivo en las pruebas de consumo de drogas que la Policía Local le practicó justo después de que se produjera el siniestro. Tal y como consta en el atestado policial que se redactó a raíz del accidente, el chófer dio, concretamente, positivo en cocaína, lo cual podría complicar su situación legal de cara al juicio que habrá de celebrarse próximamente en los juzgados de Vitoria.
Una vez practicadas las preceptivas pruebas de alcohol y drogas y confirmarse el resultado positivo, el propio conductor reconoció ante los agentes que había consumido la sustancia durante el fin de semana anterior al siniestro, por lo que podría conservar trazas de droga en el organismo pero que éstas no afectaran a su comportamiento al volante. El atestado, de hecho, recoge que, en opinión de los policías que le atendieron, no parecía encontrarse bajo los efectos de sustancia estupefaciente alguna y precisa que se desenvolvía con normalidad.
En cualquier caso y de acuerdo con diversas sentencias firmes, conducir tras haber consumido cocaína no es necesariamente constitutivo de delito. La ingesta debe influir en la conducción o poner en peligro la seguridad del tráfico, según señalan diversos jueces. Es más, no basta con constatar que se ha consumido cocaína, sino que además, hay que probar que el acusado conducía bajo la influencia de dicho consumo. Si este siniestro ya se vio envuelto en polémica desde un principio, después de que varios testigos indicaran que el hombre atropellado había cruzado correctamente la vía por un paso de cebra, ahora el juez deberá establecer si el conductor se encontraba bajo los efectos de la droga o si bien únicamente presentaba restos de la sustancia en su organismo que no llegaron a comprometer su forma de guiar el autobús que cubre el servicio de la Diputación alavesa.
El atropello tuvo lugar el pasado lunes, unos minutos antes de las nueve de la mañana en la confluencia de las calles Portal de Castilla, Castillo de Fontecha y Rosalía de Castro. El autobús foral, perteneciente a la línea 15, cubría el trayecto entre Vitoria y Llodio. Acababa de pasar por el campus de la Universidad del País Vasco en la capital alavesa y se dirigía hacia la estación de autobuses cuando tuvo lugar el accidente mortal.
La víctima, que según el testimonio aportado por varias personas se encontraba cruzando por el paso de cebra, sufrió un brutal impacto en la cabeza tras ser atropellado y presentaba diversas heridas por las que sangraba abundantemente. Una agente de la primera patrulla de la Policía Local que acudió al lugar procedió a practicarle diversas maniobras de reanimación para tratar de salvarle la vida, pero el hombre falleció prácticamente en el acto. Cuando pocos minutos después los equipos médicos se personaron en el lugar del siniestro a bordo de dos ambulancias, únicamente pudieron confirmar el fallecimiento del viandante. Consultados por las nuevas informaciones en torno a la investigación, los portavoces municipales señalaron que el caso se encuentra en el juzgado y que no añadirían ninguna otra información a la ya aportada el lunes.
Pruebas. En las pruebas que la Policía Local practicó tras el accidente, el conductor del autobús implicado en el atropello mortal del lunes dio positivo en drogas.
Atestado. Según el atestado policial, el chófer reconoció haber consumido cocaína días antes, si bien aseguró que ya no se encontraba bajo su influencia.
Jurisprudencia. Según varias sentencias, no basta con acreditar el consumo de drogas para constatar un delito. Hay que probar que la conducción se vio afectada por dicho consumo.