vitoria - La ciudadanía de Vitoria conoce a la perfección cuáles son las reglas de juego que ha de seguir tanto cuando se sienta al volante de un automóvil como cuando se monta en la bicicleta o cuando camina por la calle. A pesar de esta certeza, no siempre actúa de acuerdo con su papel, lo que deriva inexorablemente en situaciones de riesgo y en accidentes. Si nos fijamos en el comportamiento de los conductores, sólo durante el año pasado, la capital alavesa registró 4.600 accidentes de tráfico, de los cuales 232 se produjeron porque los automovilistas no respetaron las señales de stop o ceda el paso. Otros 74 llegaron tras rebasarse semáforos en rojo, 57 más por invadir pasos de cebra cuando no correspondía y 63 por circular a velocidad excesiva. Los peatones, por su parte, provocaron 34 siniestros por cruzar la calle por lugares incorrectos y 8 más por no atender al semáforo en rojo. Con estos datos en mente y para tratar de inculcar civismo, el Ayuntamiento de la capital alavesa ha puesto ya en marcha una campaña de concienciación dirigida a todos los actores que intervienen en la escena de la movilidad. A través del lema Hobeto alde onetik, tira por el lado bueno, se buscará convencer a los gasteiztarras de la necesidad de fomentar la convivencia entre los distintos modos de transporte. En el caso de que, una vez concluida la iniciativa, las estadísticas revelen que los ciudadanos siguen sin aprender la lección, el Consistorio no descarta endurecer las medidas punitivas que aplica a los infractores.

“¿Atajo por Postas ahora que no está la Poli?”, se pregunta un ciclista. “¿Y si dejo el coche en el bidegorri? Sólo es un minuto...”, se plantea una conductora. Estas dos imágenes son sólo dos de los ejemplos que desde 60 soportes publicitarios y pantallas distribuidas por toda la ciudad tratarán de hacer reflexionar a los ciudadanos a lo largo de los próximos días. El concejal de Espacio Público, Iñaki Prusilla, subrayó que la intención de la campaña, que irá acompañada de acciones sorpresa y de actividades dirigidas a personas mayores y escolares, consiste en llamar la atención. “Las normas están para cumplirlas en todo momento, sobre todo si queremos una convivencia respetuosa entre los diferentes modos”, advirtió ayer el edil. Prusilla detalló que las “acciones sorpresa” que se desarrollarán en las calles reproducirán conflictos reales relacionados con la movilidad vitoriana y buscarán cambiar determinados hábitos negativos.

responsabilidad personal Paralelamente, el concejal de Seguridad Ciudadana, Carlos Zapatero, quiso poner el acento en la responsabilidad personal de cada ciudadano. “La seguridad comienza por uno mismo. Cada uno de nosotros tiene una parte importante de responsabilidad a la hora de generar un entorno urbano seguro donde sea posible una adecuada convivencia de los distintos modos de movilidad”, destacó el portavoz municipal.

Zapatero aseguró que la mejor manera de fomentar los comportamientos cívicos pasa por observar de forma escrupulosa la normativa vigente. “Hay que actuar correctamente respetando las ordenanzas, ya que ello nos aportará seguridad. Muchas veces creemos que no pasa nada por incumplir la norma, pero no es así. Los datos sobre accidentes están ahí y hablan por sí mismos. Además, por lo general, estas malas actuaciones suelen pasar factura a los más débiles: los mayores de 65 años y a los niños. Ante una mala decisión, como puede ser cruzar mal la calle o saltarse un semáforo para ahorrar tiempo o para atajar, las consecuencias pueden ser graves”, manifestó.

Con el fin de que estas malas decisiones dejen de formar parte de las estadísticas de la siniestralidad vial en Vitoria, Zapatero animó a los ciudadanos a respetar la norma, evaluar las posibles consecuencias y reflexionar unos segundos antes de tomar el camino adecuado, “ya que es la única manera de que todos salgamos ganando”. El titular de Seguridad Ciudadana se planteó, no obstante, la posibilidad de que el mensaje de convivencia no cale de la manera prevista y advirtió de que “si finalmente hay que tomar decisiones punitivas de mayor envergadura para garantizar la seguridad, no les quepa duda de que lo haremos”.

Stop y ceda el paso. 232 de los 4.600 accidentes de tráfico registrados el año pasado en Vitoria entre vehículos estuvieron provocados por conductores que no respetaron las señales de stop y ceda el paso.

Semáforos. Otros 74 automovilistas sufrieron un siniestro por saltarse un semáforo en rojo, 63 por circular a velocidad excesiva y 57 por invadir pasos de cebra cuando cruzaban peatones.

Peatones. 34 peatones causaron accidentes por cruzar la calle por lugares inadecuados y otros 8 por hacerlo con el semáforo en rojo.

Campaña. El Ayuntamiento de Vitoria ha iniciado ya una campaña de concienciación dirigida a conductores, ciclistas y peatones para fomentar el respeto de las normativas de movilidad.

Medidas punitivas. Una vez concluida la campaña, los responsables municipales analizarán el grado de cumplimiento de las normas y en caso de que lo consideren necesario, endurecerán las medidas punitivas que se aplican a los infractores.

El concejal de Espacio Público detalló que la campaña de concienciación irá acompañada de “acciones sorpresa en la calle” en las que se reproducirán situaciones reales de conflicto relacionadas con la movilidad vitoriana.

El titular municipal de Seguridad Ciudadana recordó que la toma de malas decisiones, como cruzar mal la calle o saltarse un semáforo en rojo para ahorrar tiempo pueden acarrear consecuencias graves. Unas consecuencias que afectan sobre todo a los colectivos de personas mayores y niños.