Vitoria - La oficina del Síndico de Gasteiz ha vivido un primer trimestre de 2017 de lo más movido. Según informó ayer en comisión el defensor vecinal, Martín Gartziandia, los asuntos tratados por su institución experimentaron un crecimiento “muy significativo” entre los pasados meses de enero y marzo, con un incremento del 42% en el número de altas de expedientes respecto el mismo periodo de 2016, e incluso del 100% en relación, por ejemplo, a 2013. Quejas y reclamaciones ciudadanas disparadas por la mala praxis de la Administración local a las que se sumaron también numerosas visitas (162), citas presenciales (83) y consultas puntuales, que en este último caso llegaron a duplicarse. En números globales, el Síndico sumó 996 intervenciones, 250 más que en los tres primeros meses de 2016. En definitiva, un 25% más.

Gartziandia repartió varios tirones de orejas al gobierno local por la gestión de algunos de los asuntos que han derivado en la apertura de estos expedientes y por las respuestas que, en ocasiones, reciben sus recomendaciones por parte de la Administración y sus técnicos. Sin embargo, realizó también un análisis “positivo” de estos números, ya que a su juicio el crecimiento “sostenido” de las actuaciones que lleva a cabo demuestra que la ciudadanía “confía cada vez más en la institución”, un hecho por el que el síndico mostró su “satisfacción”.

Uno de los últimos asuntos espinosos que han recalado en su mesa, o no tanto, es la desesperada situación que viven varios vecinos de la manzana que comprende los números 13 y 15 de la calle Florida y 6 de San Prudencio, el edificio donde anteriormente se asentaban los cines Guridi y que desde junio de 2015 alberga un supermercado BM. El motivo, la existencia de una vieja y enorme cubierta en el patio interior de este edificio que, al margen de no cumplir con la normativa urbanística, pega con una de las fachadas a un nivel muy próximo al borde inferior de sus ventanas.

Las hermanas Arantza y María Luisa de Gamón, que han acudido al Síndico en busca de una solución, son las dos grandes damnificadas de este despropósito que se remonta a mediados del pasado siglo, cuando la empresa Carbones Vallejo entonces allí ubicada fue autorizada a instalar esta techumbre a dos aguas. Desde entonces, unos antepechos exteriores evitan que el agua y la suciedad de la cubierta del patio entren directamente a las viviendas, pero en el canalón se acumulan todo tipo de suciedades como excrementos de palomas, incluso aves muertas, u hojarasca.

Ocasión perdida La oportunidad perdida que ha supuesto la llegada de BM a esta ubicación ha reactivado la indignación de estas vecinas, ya que durante las obras del supermercado la cubierta llegó a desmontarse pero, finalmente, se dejó en la misma situación. “Había prisa por inaugurar el supermercado y hubo cosas que no se hicieron correctamente”, censuró María Luisa ante los grupos municipales. Jaione Aguirre, responsable municipal de Transparencia, reconoció que el Ayuntamiento negocia con BM una solución a este problema, aunque vistas las conversaciones ya mantenidas con la firma “parece imposible” una solución pactada. El titular de Salud Pública, Peio López de Munain, se comprometió por su parte a exigir la limpieza periódica del canalón a la propiedad del inmueble o a la promotora de la obra mientras no se encuentre otra solución.

Junto a este y otros muchos asuntos, el síndico se mostró también “muy preocupado” por el aumento del número de vecinos “que no tienen ningún recurso” y en los últimos tiempos han tocado su puerta. A muchos de ellos se les ha suspendido la RGI y, por ello, dejan de percibir temporalmente también ayudas municipales tan básicas como pueden ser los bonos para alimentación que se canjean en los supermercados. “No me gustaría constatar que hemos superado esta línea roja”, alertó Gartziandia.

En lo que va de año, la oficina del Síndico ha emitido un total de cinco recomendaciones, algunas de ellas ya respondidas positivamente por el gobierno municipal, y ha recibido quejas sobre múltiples temas como las constantes averías en las rampas y el ascensor del Casco Viejo.

Actividad creciente. La oficina del Síndico registró 996 intervenciones en el primer trimestre del año, 250 más que en el mismo periodo de 2017.

Cinco recomendaciones. En lo que va de año, el defensor vecinal de Gasteiz ha emitido cinco sugerencias sobre el derecho a la propia imagen, la falta de expropiación de un inmueble afectado por el PERI, la denegación del alquiler del Teatro Principal a una escuela de danza, la falta de atención en euskera por parte de la Policía Local y la bonificación de vehículos clásicos en el impuesto de circulación.

Una de las vecinas afectadas por la cubierta cargó contra la premura con que se dieron las licencias y se ejecutó la obra del BM.

42%

Aumento del número de expedientes abiertos por la oficina del Síndico respecto al primer semestre del año 2016.

4.281

Asuntos recibidos entre enero y marzo en el buzón ciudadano, por los 3.924 del mismo periodo del año anterior.