vitoria - Con los días previos a Navidad como fecha límite para la aprobación en las Juntas Generales de los Presupuestos forales de 2017 -el año pasado el visto bueno se retrasó sin embargo al 29 de diciembre, aunque no es lo habitual- el diputado general, Ramiro González, apuntó ayer que en los próximos días volverá a reunirse con el portavoz de EH Bildu, Kike Fernández de Pinedo, además de con otros grupos, para tratar de consensuar un pacto “sin que afecten las negociaciones en el Gobierno Vasco”.

Por el momento, como adelantó DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, en la primera cita la coalición abertzale trasladó al diputado general su intención de negociar abiertamente una posible reedición del acuerdo que les une actualmente, si bien subrayaron la necesidad de que “antes de empezar a hablar de gastos”, los primeros puntos que tienen que estar sobre la mesa de negociación tienen que ser los relacionados “con los ingresos”.

O lo que es lo mismo, con las modificaciones fiscales para 2017 para que antes de final de año se pongan en marcha al menos tres cambios fiscales: el gravamen del 50% del IBI a las viviendas vacías en las que no figure nadie empadronado, que las empresas que facturan más de un millón de euros al año pasen a pagar también el IAE en lugar de fijar el límite en dos millones como hasta ahora y cambios en el Impuesto sobre el Patrimonio, única de las tres condiciones que no ha sido aprobada todavía.

El propio Kike Fernández de Pinedo compareció ayer ante los medios para anunciar que EH Bildu planteará a las fuerzas de izquierda de la Cámara foral -Podemos e Irabazi- un acuerdo de mínimos en cinco áreas -fiscalidad, financiación municipal, empleo, servicios sociales y medio ambiente- de cara a la negociación presupuestaria. Un posible acuerdo que se debatirá mañana y que forma parte de la petición que la asamblea de afiliados de la coalición trasladó a los responsables del partido el pasado fin de semana.

Para EH Bildu, el proyecto de Presupuestos elaborado por el gobierno foral tiene “dos grandes carencias”. “Por un lado, todo lo que tiene que ver con la financiación municipal, porque no se ha revisado la norma foral tal y como se había previsto el pasado año, y por otro, la consolidación de los servicios de euskara, igualdad, participación y medio ambiente”, señaló Fernández de Pinedo, que detalló algunas propuestas que trabajarán por incluir en las Cuentas, como un plan estratégico de reindustralización de Álava, otro para el desarrollo del entorno rural, la gestión del agua y el estado de ríos como el Nervión y el Zadorra, las energías renovables, agilizar la valoración de dependencia y la promoción de las residencias de San Prudencio, Pobes y Aiaraldea o la creación de un servicio para evitar la exclusión social, entre otras.

Por su parte, el portavoz juntero del PP, Javier de Andrés consideró que el presupuesto de la Diputación de Álava para 2017 crece de forma “muy exagerada” a costa de “sangrar a las familias, los trabajadores y las empresas” a través de una “escalada fiscal”, y censuró que las Cuentas se incrementen un 8% cuando “la economía no crece a ese ritmo” y la capacidad de gasto de las familias tampoco sube en esa proporción porque los salarios están “congelados o suben un 0,5%”. - DNA/Efe