Vitoria - Nadie se espera que el chófer del autobús sea gitano, pero cada vez hay más casos que prueban que la inserción social y laboral de la población romaní es una realidad en Vitoria. Prueba de ello son los 120 contratos laborales y las 300 personas atendidas este año por la Fundación Secretario Gitano, tal y como dio ayer a conocer la prospectora laboral de esta agrupación, María Ángeles Cotrina.

Estos resultados forman parte de los dos programas de empleo dirigidos a ese segmento de la población y recogidos en el convenio del Consistorio vitoriano y la Fundación Secretariado Gitano, estimado para este año en 37.000 euros. En total, como matizó Cotrina, “se han conseguido más de 1.400 contratos en estos 15 años” - DNA