vitoria - El Ayuntamiento de Vitoria, sin más hueco en el cinturón para hacer agujeros, necesita revertir los números rojos y llenar la caja. Por eso, la venta de patrimonio municipal se ha convertido en una de sus operaciones prioritarias. Hace poco, el equipo de gobierno tomó un soplo de aire al embolsarse 1,047 millones de euros al dejar la vieja sede de la Arich en manos del dueño de la firma de ropa Udalaitz. Y ahora, confía en hacer lo mismo con Gure Txokoa. La edil de Hacienda, Itziar Gonzalo, explicó ayer a preguntas del PP que está a la espera de que finalicen trámites ajenos a la gestión municipal, relativos al “catastro, la liquidación de impuestos, la inscripción en el registro...” para a partir de ahí tratar de “vender el edificio a Amvisa o, si el consejo de la sociedad no quiere comprar el edificio, sacarlo a concurso”.

Vuelve a estar sobre la mesa, por tanto, la posibilidad de tantear a sociedad pública de aguas a pesar de que hace escasamente un año, cuando se cerró el acuerdo presupuestario, ese planteamiento quedó aparentemente descartado porque EH Bildu se había manifestado contrario a la medida. En cuanto a la tasación, aunque al principio se habló de un precio aproximado de 5,5 millones, ahora el gobierno prefiere esperar a “tener el informe cerrado” para conocer el valor preciso de la propiedad.

Lo que es seguro, en cualquier caso, es que el gabinete de Urtaran hará lo posible por sacarle provecho. “Cuando decidimos venderlo, nos encontramos con que una parcela no estaba dentro del perímetro, lo que nos obligó a realizar una serie de trámites urbanísticos y financieros. Ahora seguimos con trámites, pero desde luego que mantenemos la intención de vender el edificio”, subrayó Gonzalo. - DNA / Foto: DNA