vitoria - La de ayer fue otra ponencia de fiscalidad corta e informativa. Apenas dos horas de reunión para presentar a los grupos un dossier sobre el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras, con su evolución a lo largo de los años y el impacto que tiene en las arcas municipales. Fundamentalmente, lo que el equipo de gobierno puso de manifiesto es que el Ayuntamiento gasteiztarra tiene pocas opciones de intervenir sobre este tributo porque su tipo impositivo ya está fijado en el límite establecido por la normativa, un punto por encima de municipios cercanos como Burgos, Logroño, Santander o Pamplona.
El encuentro de ayer fue también el último en el apartado de grandes impuestos. Ahora, se hará el mismo trabajo de análisis con las tasas y los precios públicos. No obstante, la previsión para el próximo 6 de julio es que cada grupo acuda a la ponencia de fiscalidad con una propuesta de conjunto para todos los tributos principales. Será entonces, por tanto, cuando comience el debate de verdad y, con él, las tensiones. Hay varios gravámenes que tienen enfrentados a los grupos políticos y obligarán al gobierno de Urtaran a esforzarse en la búsqueda de acuerdos.
Uno de los más sensibles es el IBI, del que también se va a seguir hablando mucho. Ayer, el equipo de gobierno informó de que ha habido un cambio de fecha para la aprobación de la modificación de la ordenanza del IBI 2017 en Pleno. Se someterá a votación definitivamente el 14 de julio. - J.S.
