El diputado general de Álava, Ramiro González (PNV), y el presidente del PP alavés, Javier de Andrés, se han enfrentado hoy en el pleno de las Juntas Generales al reprocharse la utilidad de contratos suscritos con los fallidos proyectos automovilísticos Hiriko y Epsilon y con la asociación DenokInn.

Vitoria. González ha respondido en el pleno de control de las Juntas Generales de Álava a la interpelación del portavoz del PP, Javier de Andrés, quien le ha pedido su opinión sobre el interés público de varios convenios.

En concreto se ha referido a los suscritos entre la Agencia de Desarrollo de Álava con Epsilon Euskadi -el fracasado proyecto automovilístico vasco que aspiraba a competir en la Fórmula Uno- y con la asociación dedicada a impulsar la I+D+i DenokInn durante la legislatura 2007-2011, cuando gobernaba el PNV.

En su intervención, De Andrés ha cuestionado los casi cuatro millones de euros gastados en ambos casos y ha recordado que en 2011, cuando el PP estaba aún en la oposición, pidió un informe sobre la conveniencia del convenio con DenokInn.

El dirigente popular ha recordado que la entonces directora de Álava Agencia de Desarrollo y actual edil del PNV en Vitoria, Itziar Gonzalo, firmó el informe en el que se decía que DenokInn era "un instrumento óptimo para materializar la promoción y difusión en el territorio de nuevas iniciativas en sectores económicos de futuro" y que era "un interlocutor clave en la diversificación del tejido económico".

Ramiro González ha respondido a De Andrés diciendo que cuando él estuvo al frente de la Diputación hizo una "defensa cerrada no de la legalidad, sino de la conveniencia" de dichos contratos.

El diputado general ha mencionado que en las alegaciones que el dirigente popular alavés presentó a los informes del Tribunal Vasco de Cuentas Públicas de los años 2009, 2010 y 2011 sobre el caso Epsilon dijo que este proyecto era "una excepcional herramienta" para publicitar Álava.

También se ha referido al caso DenokInn, en el que se investiga un convenio suscrito en 2010 por la entonces diputada alavesa de Promoción Económica de Álava, Arantza Zenarruzabeitia (PNV), con esta entidad sin ánimo de lucro que trabaja en el mundo de la I+D, por posibles pagos sin facturas.

DenokInn ingresó un total de 337.000 euros y la Fiscalía investiga si de ese montante total pudo recibir unos 125.000 sin justificar.

Dicha investigación se suma a los 3.640.000 euros en contratos publicitarios que Álava Agencia de Desarrollo suscribió con Epsilon Euskadi.

Sobre el contrato con DenokInn, Ramiro González ha recordado que De Andrés en sus alegaciones al Tribunal de Cuentas dijo que esta asociación tenía "una experiencia avalada internacionalmente por el MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts)", por lo que le ha acusado de "sobreactuar" y "desdecirse".

Además de mencionar su apoyo a ambos contratos, el diputado general ha acusado a De Andrés de conceder mientras gobernaba una subvención de 12.000 euros a la empresa Basque Robot Wheel,S.L. para el desarrollo del proyecto de coche eléctrico Hiriko que no llegó a comercializarse, cantidad que la institución ha pedido ya que sea reintegrada, según la orden foral a la que ha tenido acceso EFE.