gasteiz - Doble golpe al tráfico de estupefacientes en territorio alavés. Agentes de la Policía Nacional han detenido en Vitoria a tres personas a las que se les imputa un delito de tráfico de estupefacientes después de la desarticulación de dos puntos de venta de droga instalados en la ciudad. Además, agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional han desmantelado otra organización de narcos que introducía droga en España por vía marítima a bordo de embarcaciones tipo velero, dos de cuyos presuntos integrantes han sido arrestados en Álava. En total, cinco detenciones en suelo alavés en cuestión de unas pocas horas.

Según informó ayer el Ministerio español de Interior, los agentes encargados de la primera operación encontraron en el registro de un local comercial de Vitoria varias recetas médicas en blanco, doce frascos de trankimazin con 549 comprimidos de este potente tranquilizante, 28 comprimidos de tranxilium y 30 pastillas de diazepam. La Policía Nacional, que se ha valido de la colaboración ciudadana, desarticuló además otro punto de venta relacionado con el primero en un domicilio particular de la capital alavesa. Los investigadores pudieron comprobar que los clientes accedían al mismo siguiendo estrictas medidas de seguridad para no llamar la atención. En el registro practicado en la vivienda se incautaron dos kilos y medio de cogollos de marihuana. La investigación ha sido desarrollada por la Brigada Provincial de Policía Judicial de Vitoria.

La segunda operación policial, de muchísima más envergadura, se ha desarrollado tanto en la isla de Gran Canaria como en la Comunidad de Madrid y en Euskadi. Los miembros de esta presunta red desmantelada camuflaban las sustancias estupefacientes en el interior de bombonas de gas y de baterías eléctricas con el objetivo de trasladar la sustancia ilegal procedente de Sudamérica. En total han sido detenidas 13 personas y la Policía se han incautado de varias armas de fuego, abundante munición y 115 kilogramos de cocaína que pensaban distribuir por diversos países europeos. En la investigación han colaborado la Dirección de Operaciones Aduaneras de Francia, el Equipo de Investigación Criminal (RST) de Holanda o la Dirección Antinarcóticos de Colombia.

La investigación policial se inició en octubre de 2014, cuando la Policía Nacional tuvo conocimiento de que un grupo afincado en Galicia tenía como objetivo la introducción de grandes cantidades de cocaína en España. Al parecer, pensaba hacerlo por vía marítima, utilizando para ello embarcaciones recreativas tipo velero. Según avanzó la investigación, se pudo determinar que la organización tenía ramificaciones en otras partes del territorio estatal, como Canarias, Euskadi y Madrid, así como a nivel internacional, en Cuba, Grenada o Bonaire.

Según informó ayer la Guardia Civil, las investigaciones se centraron desde su inicio, de forma más concreta, en las actividades del presunto líder de esta organización, asentado en Gran Canaria, quien se dedicaba a la introducción y distribución de grandes partidas de cocaína procedentes de Sudamérica. Asimismo se pudo determinar que esta persona, para disminuir los riesgos y las pérdidas económicas que se podían generar el apresamiento de las embarcaciones, utilizaba un modus operandi concreto que consistía en el envío anual de dos o tres embarcaciones distintas, que guardaban en su interior cantidades importantes de cocaína, superiores al centenar de kilogramos.

Tras realizar diferentes pesquisas, la Policía averiguó que el líder de la organización se trasladó en varias ocasiones a Sudamérica para acordar personalmente la adquisición de la cocaína y se encargó de proporcionar la logística necesaria para su organización. Para ello adquirió en Canarias diversas embarcaciones que, una vez modificadas por otros miembros de la organización, eran tripuladas hasta el mar Caribe, donde se aprovisionaban de la cocaína, para después regresar a costas españolas.

La Policía y la Guardia Civil localizaron una de estas embarcaciones a mediados de diciembre de 2015 a 1.000 millas al sur de las Azores y, tras detener a su patrón, encontraron 115 kilos de cocaína camuflados. En los registros posteriores los agentes se incautaron de armas cortas tipo revolver, armas largas semiautomáticas, munición, gran cantidad de dinero en efectivo y vehículos de alta gama.