coronación es durante estos días el barrio estrella de la capital alavesa, el campo de pruebas de un experimento a nivel europeo que pretende convertir un distrito anticuado e ineficiente desde el punto de vista del consumo de energía en una referencia para ciudades de toda la Unión precisamente en esa materia. Sin embargo, no hay que ir muy lejos para encontrar espacios a los que exportar el modelo que se quiere implantar en Coronación. Cuando se levantó este barrio, a finales de los años cincuenta y principios de los sesenta del pasado siglo, las grúas también trabajaban a todo ritmo en Adurza, en Zaramaga, en Ariznavarra y en Abetxuko, los otros barrios de oro, como se les ha denominado con mayor o menor fortuna.

También en ellos las viviendas más viejas carecen de ascensor, y también en estos distritos las fachadas y carpinterías dejan escapar el calor. DIARIO NOTICIAS DE ÁLAVA ha contactado con los representantes vecinales de Ariznavarra, Abetxuko, Adurza y Zaramaga para conocer su opinión sobre el proyecto y las posibilidades reales de que la renovación del barrio se extienda a todo el antiguo cinturón obrero de la capital alavesa.

“Ariznavarra se está muriendo” Ana Osaba preside la asociación de vecinos de Ariznavarra, donde llevan años buscando una fórmula para solucionar los problemas de accesibilidad y ahorro energético que presentan las viviendas más viejas del barrio. “En mi bloque estudiamos sacar un alero en la fachada en la zona de las escaleras para poner ahí el ascensor y que te deje en la planta del piso, pero el precio se disparaba. El tema del ahorro energético también lo miramos, e hicimos una asamblea para pedir las subvenciones del Gobierno Vasco, pero el problema es que al final hay que adelantar el dinero, eran más los inconvenientes que las facilidades”, señala Ana. Es la serpiente que se muerde la cola, si hay vecinos que no pueden pagar la factura del gas, difícil lo tendrán para adelantar el dinero de una obra de envergadura, y por ello Ana entiende que la Administración debe dar con la tecla para solucionar el problema.

“Yo entiendo que decir es muy fácil, y mandar y organizar es difícil, pero Ariznavarra tiene ese problema concreto de la accesibilidad y el ahorro energético y se está muriendo, los comercios cierran, no hay vida, no hay apenas gente joven y los mayores se buscan la vida en otro sitio, porque son bloques de cinco alturas sin ascensor... Nos gustaría que se trasladará aquí un proyecto como el de Coronación, pero el Ayuntamiento, la Diputación o el Gobierno Vasco deberían buscar la fórmula para adelantar el dinero de las subvenciones”, advierte. De hecho, asegura Ana, puede que en Coronación ese sea el principal problema para desarrollar el proyecto. “Si hay que adelantar el dinero, ¿cuándo te lo devuelven?, y además la otra mitad la tienes que poner tú. No sé, ojalá salga todo, pero yo todavía no me lo creo mucho, a nosotros sólo lo del ascensor nos salía a 18.000 euros por vecino”, señala.

Lo mismo comenta Serafín Lahidalga, presidente del consejo de zona de Olarizu, con respecto a Adurza. “Nos parece positivo el proyecto que se ha aprobado, pero no tenemos muy claro cómo se puede canalizar el tema de las aportaciones de los vecinos. Aquí nos informamos a raíz del plan renove para el barrio y cada vecino tenía que aportar 25.000 euros, era inviable”, apunta.

Diana Paniagua representa a la asociación de vecinos Zaramagatarrak, y de entrada asegura que “lo de Coronación es fantástico, y que se extienda a toda la ciudad también porque es lo que toca, ahora ya más no se puede construir”. Ahora bien, añade, “ese proyecto se ha hecho sin que los vecinos se enteraran ni lo solicitaran, cuando en Zaramaga se lleva pidiendo un plan integral de rehabilitación desde hace siglos y no ha habido manera”. Según Diana, Zaramaga era la prioridad a la hora de establecer un proyecto de este tipo a raíz de un estudio elaborado por Tecnalia para el Gobierno Vasco, y de hecho se había empezado ya a rehabilitar un bloque en la calle Laguardia, hoy todavía en obras. “Mucho nos tememos que nos hemos quedado ahí”, señala la portavoz vecinal. En cuanto a la posibilidad de extender el modelo de Coronación al resto de barrios de oro, como plantea el Ayuntamiento vitoriano, Diana cree que para cuando eso suceda “igual nos hemos muerto todos”.

Según explica, la situación es urgente, y se deberían seguir modelos como el de Eibar, donde, indica, se han rehabilitado quince portales, por los tres de Zaramaga. Eso sí, “la idea de Coronación es genial, y animo a la gente del barrio a que no pierda la oportunidad, y no se dejen liar si hay partidos que se ponen en contra, que no se dejen politizar ni engañar”.

Oskar González representa a los vecinos de Abetxuko, un caso especial dentro de los barrios más antiguos de la ciudad. Construido al otro lado del Zadorra, sobre una colina, junto a una antigua aldea, “aquí no sabemos muy bien si somos un pueblo o un barrio y por eso hemos estado un poco dejados de la mano del Señor, pero eso sí, Abetxuko tiene 56 años y también necesita una vuelta, un acondicionamiento”. En ese sentido, explica, “esperamos con los brazos abiertos que se cumplan las promesas de que se va a actuar en todos los barrios antiguos, y tenemos nuestras propias ideas al respecto”.

Hay varios frentes sobre los que trabajar, algunos ligados al especial carácter de Abetxuko, pero también aquí la accesibilidad y la eficiencia energética son dos de los problemas a los que hay que hacer frente. “Yo mismo este año he tenido que aislar la casa porque el calor que se pierde por los tejados de las viviendas bajas es una barbaridad”, señala Oskar, que en todo caso felicita al barrio de Coronación porque “se ha encontrado con una buena cantidad de dinero, y estamos muy contentos por ellos”.