Miren Larrion ha presentado esta mañana las diez medidas urgentes que tomará desde la alcaldía de Gasteiz. “Queda menos de un mes para desalojar al PP de las principales instituciones de Araba. Por eso, no hay tiempo que perder. Una vez desalojado al PP tenemos claro hacia donde queremos caminar. Y por eso hoy presentamos las 10 medidas de urgencia que tomaremos una vez hayamos formado el nuevo gobierno”, ha dicho.
1.- Impulsar una auditoría social. Levantaremos alfombras y abriremos las ventanas del ayuntamiento junto a la ciudadanía. La auditoria permite a la ciudadanía vigilar y conocer el estado real de las cuentas. “Que cada gasteiztarra sepa cómo están las cuentas, sepa en qué estado esta la deuda real del ayuntamiento y pueda valorar qué parte de esa deuda es ilegítima”.
2.- Crear empleo público de calidad. Los servicios públicos son prioritarios y el empleo también, por eso hay que reconducir la política de personal que ha llevado el Ayuntamiento con Maroto al frente. Cubriremos las vacantes actuales del ayuntamiento y abriremos las listas de sustitución. “Con estas medidas conseguiremos dos objetivos; el primero, asegurar que los servicios público se prestan con la calidad necesaria, y segundo, garantizar un empleo de calidad. Calculamos que para finales del 2015 habremos recuperado 300 puestos de trabajo”, explica Larrion.
3.- Convertir Gasteiz en un municipio antidesahucios. Impulsaremos un protocolo que recoja un trabajo continuo con quienes trabajan en contra de los desahucios y las personas afectadas, “así podremos detectar de forma precoz ciertos casos y aseguraremos una intervención preventiva”. Dotaremos con recursos para ofrecer asesoramiento jurídico en estos casos e impulsaremos un servicio de mediación. Intervendremos con la prevención en casos iniciales de impagos y promoveremos que la entrega de la vivienda salde la deuda pendiente, sin pagarse tasas o impuestos derivados. Como medida de presión, el ayuntamiento dejara de trabajar con las entidades que lleven a cabo procesos de desahucio.
4.-Reforma en profundidad de la política de participación ciudadana, basada sobretodo en la reforma absoluta de la mentalidad y la voluntad política.