gasteiz - Numerosos ayuntamientos alaveses han sumado sus fuerzas para oponerse a los proyectos de la industria gasista, que intensifica sus presiones para tratar de realizar prospecciones con la técnica del fracking en numerosos espacios protegidos. A través de un comunicado conjunto, los representantes políticos de los ayuntamientos de Zambrana, Trebiño, Peñacerrada, Berantevilla, Bernedo, Lantarón, Ribera Baja y Ribera Alta han manifestado, una vez más, su rechazo a la fracturación hidráulica. Según la nota, en las últimas semanas han llegado, a los diferentes municipios afectados por el permiso Libra, cartas procedentes del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente informando del inicio del procedimiento para ver si procede realizar un estudio de impacto ambiental relativo a una serie de pruebas sísmicas con las que obtener una radiografía del subsuelo. Dichos ensayos son la antesala para comenzar con los pozos de fracking, como aparece detallado en la lista de trabajos del permiso Libra.
En esa lista se indica que el tercer y cuarto año se llevarían a cabo estos estudios sísmicos. Después, durante el quinto y sexto años se realizaría un pozo exploratorio con su correspondiente test de producción. A partir de entonces, si lo obtenido resulta “positivo” para la empresa, se pasaría a la fase de explotación, con la previsible llegada de distintos pozos -distintas fuentes enumeran estos en centenares-, que supondrían, según los municipios, “una amenaza de primer orden contra el territorio, el agua de la que nos abastecemos y la salud de nuestros habitantes”.
Por dichas razones, los ayuntamientos se han comprometido a hacer todo lo que esté en su mano para que esto no suceda. En este sentido, los consistorios han presentado una alegación argumentando que, en todo caso, debería hacerse un estudio de impacto ambiental estratégico, como recomienda la Unión Europea, que tome en cuenta todo el proceso de fracking: desde las pruebas sísmicas, hasta la realización de cientos de pozos de producción. A este estado se cosas se suma que hay dos ayuntamientos, Peñacerrada y Bernedo, afectados por el permiso Libra, que todavía no han recibido ninguna notificación.
Los firmantes de la nota han anunciado que, en próximas fechas, y en colaboración con Fracking Ez Araba y con personas que viven en los municipios y que están muy preocupadas por la situación, se realizarán asambleas informativas en diferentes pueblos de la zona para informar y movilizar a la población.
La empresa que tiene la concesión de este permiso es Frontera Energy Corporation, según certifica uno de los documentos de alegaciones, en este caso del Ayuntamiento de Condado de Trebiño, que aprobó formalmente la oposición el pasado 20 de marzo, en sesión plenaria. Según se explica en el documento de alegaciones de este municipio, la declaración de impacto ambiental debe recaer sobre todo el proyecto, y no sólo sobre el sondeo, como marca la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea. En segundo lugar, la declaración ambiental debe tener carácter estratégico. Es decir, que debe estudiarse cada uno de sus sectores que podrían ser afectados: ganadería, silvicultura, agricultura, pesca, energía, minería, industria, acuicultura, transporte, gestión de residuos, gestión de recursos hídricos, telecomunicaciones, turismo y otros muchos aspectos. Y, en tercer lugar, se solicita que antes de nada se realice una evaluación de impacto ambiental ordinaria, independiente de las dos anteriores.
El permiso Libra está concedido a una pequeña empresa Frontera Energy Corporation, empresa constituida en 2010 con 3.000 euros de capital, ampliado recientemente a 188.000, que posee varias concesiones para la exploración de gas de pizarra. Tratando de averiguar las raíces de esta empresa, el Grupo de Análisis de los Impactos de la Minería (GAIM), “los llevó a ver su relación con Realm Energy International quien, con el asesoramiento de Halliburton -una de las grandes beneficiadas de la guerra de Irak-, está adquiriendo desde 2010 permisos de exploración de gas de pizarra, principalmente en Europa: Polonia, España, Alemania, y Francia”.