La nieve pilló ayer por sorpresa a vitorianos y alaveses. Esta vez no hubo alerta. Ni amarilla ni naranja ni roja, pese a que Euskalmet asegura que de madrugada ya tuvo conocimiento de que iba a nevar y así se lo comunicó a los equipos de emergencias y diputaciones para que pusieran sus efectivos en marcha. En cualquier caso, este manto blanco primaveral volvió a dejar bonitas estampas en las calles de la capital y algún que otro incidente en las carreteras y en una veintena de puertos de Álava y Gipuzkoa.
Pese a la llegada de la primavera, los copos volvieron a caer de forma intensa en Gasteiz. Las precipitaciones comenzaron hacia las siete de la mañana y durante más de cuatro horas nevó con intensidad, cuajando en parques, jardines, calles y aceras hasta disolverse en agua después, hacia el mediodía. Y eso que tanto las previsiones meteorológicas de Aemet como las de Euskalmet situaban la cota para ayer en los 1.100 metros. Una situación que provocó críticas a ambas agencias de meteorología por parte de los ciudadanos.
La mayoría de los altos afectados por la nieve pertenecen a la red secundaria, aunque también hubo que extremar la precaución en Altube en la AP-68 y en Etxegarate en la N-1, ambos pertenecientes a la red principal. Además, en la red secundaria se cerraron para camiones Kurtzeta y Aiurdin, mientras que en Orduña se necesitaron cadenas. Asimismo, un camión hizo la tijera al mediodía en la A-1 sentido Vitoria, justo después del túnel de Peña María, que separa La Puebla de Arganzón de Iruña Oka. El accidente, en el que se vio involucrado un segundo camión, obligó a cortar en algunos momentos algunos carriles de circulación en sentido Vitoria para que una grúa pesada moviera el vehículo. Las retenciones se sucedieron en la zona del túnel. Por lo demás, la nieve provocó varios golpes de chapa y accidentes en ciudad, así como resbalones de los viandantes.
Las precipitaciones llevaron al Ayuntamiento de Gasteiz a activar la fase de preemergencia del plan municipal de nevadas, con lo que once máquinas quitanieves salieron a la calle para limpiar las calles, ya que la nieve cuajó ante la sorpresa de la mayoría de ciudadanos. Además, la Diputación puso en las carreteras seis equipos quitanieve, 19 operarios y tres patrullas de Miñones. Y el desembalse de Ullibarri se aumentó a 15 metros cúbicos por segundo, según informó Iberdrola.
No obstante, este episodio primaveral de nieve parece puntual y ayer por la tarde los copos ya dieron paso a la lluvia, que acompañará a lo largo de la jornada de hoy, según la Agencia estatal de Meteorología Aemet. La nieve será residual y limitada a cotas relativamente bajas. Las temperaturas máximas irán en ascenso y las mínimas con pocos cambios o en ascenso al final del día. El viento soplará del oeste, en general flojo, salvo en el litoral, girando a noroeste por la tarde. - DNA
