gasteiz - La Coordinadora de ONGs de Euskadi agrupa a 86 asociaciones que trabajan fuera de nuestras fronteras en programas de cooperación y desarrollo con países necesitados. Llevan años haciéndolo y, pese a los recortes presupuetarios de la crisis, seguirán haciéndolo porque “los derechos humanos son fundamentales y no son negociables”. Además, están convencidos de que “alcanzar un nivel más alto de justicia, beneficia a todos, a los de aquí y a los de allí”, sostiene Alberto Cereijo. Un camino totalmente contrario al que, en opinión de la coordinadora, sigue Javier Maroto. Una estrategia, “no sólo encaminada a ganar votos en un caladero fácil de crisis económica, sino a sustituir derechos por privilegios y desmantelar el actual sistema de bienestar, que en el fondo es lo que busca el PP”. Una estrategia especialmente “grave” en una sociedad como la vitoriana, referente en cooperación al desarrollo. “Ahora parece mejor asociar Vitoria a una tortilla de patatas que a una ciudad de valores”. - R. Rz. de G.