vitoria - El consejo de administración de la sociedad municipal Ensanche 21 abordará hoy una cuestión vital para poder hacer realidad la disolución de la empresa, cuya razón de ser y viabilidad comenzaron a declinar con el fin del boom inmobiliario, y que a día de hoy acumula una deuda consolidada de 18,5 millones de euros.

En el quinto punto del orden del día se propondrá un aumento del capital social de la sociedad mediante la conversión de dividendos no abonados en capital social, un paso que reclamó el PNV el pasado mes de abril con el fin de disolver la empresa de forma ordenada y sin dejar pellas pendientes.

Los nacionalistas, de hecho, son los principales valedores de la desaparición de Ensanche 21, que pactaron con el gobierno del PP para finales del año pasado. Una mirada al calendario pone de manifiesto que el acuerdo no se cumplió en tiempo, pero la sesión de hoy del consejo da a entender que sí lo hará en forma.

La empresa, que nació para gestionar el crecimiento de la ciudad por Salburua, Zabalgana y Aretxabaleta, ha visto comprometida su sostenibilidad financiera por varios factores. Al margen de que en la ciudad se ha dejado de construir, más allá de algunas llamativas obras públicas, a Ensanche 21 los últimos gobiernos municipales le han detraído cerca de cien millones de euros para diversos proyectos. - T.D.