gasteiz - La cruz de la recogida de basuras en Vitoria viene de la mano de ciudadanos incívicos que dejan las bolsas a pie de contenedor o de buzón sin molestarse en depositarlas dentro. Ocurre sobre todo con la recogida neumática del Casco Viejo. “Después de cuatro campañas de concienciación en seis años aún no hemos sido capaces de acabar con estos comportamientos”, reconoce Joseba Sánchez. Así que, además de sensibilizar y sensibilizar a vecinos y hosteleros, no queda otra que multar, porque este tipo de comportamientos tiene un “efecto llamada”, asegura el jefe del servicio de gestión de residuos del Ayuntamiento. De hecho, las sanciones impuestas por la Policía Local van en aumento, a pesar de que no son para reírse: 90 euros si te pillan echando la basura fuera del buzón; de ahí hasta 300 si eres reincidente.
En los nuevos barrios también se dan casos, pero son aislados y están controlados. De hecho, en algunas comunidades de vecinos hasta se han pegado carteles de advertencia para que no se deje la basura en el suelo. “Vitoria es un modelo, un ejemplo a seguir en materia de reciclaje, pero siempre hay personas antisistema”, apunta Sánchez. “Y es lamentable porque, al final, unos pocos, pueden dar al traste con el esfuerzo realizado por los demás ciudadanos”. Y es que, separar mal la basura es contraproducente, ya que puede llevar a que todo lo depositado en el contenedor ya no se pueda recuperar, explica. Aun así, “es anecdótico, ya que hablamos de diez o doce focos negros en siete centrales de recogida”, contabiliza.
más de 200 vertederos No son, sin embargo, los particulares quienes más quebraderos de cabeza dan al Ayuntamiento. Hay empresas en la ciudad que se dedican a tirar lo que ya no les sirve por el campo, sobre todo en los solares vacíos de Salburua y Zabalgana y en los pueblos de Vitoria. El Ayuntamiento tiene identificados hasta 220 vertederos ilegales que, cada vez que los limpia, resurgen a las dos o tres semanas. “Esto sale muy caro a los ciudadanos porque este servicio no lo cubre FCC, tenemos que pagar a otras empresas”, sostiene Sánchez. Para ello también hay cuantiosas multas, de entre 300 y 5.000 euros, en función de la gravedad y de la peligrosidad de los residuos. - R. Rz de G.