no se le ha buscado un nombre corto e impactante como mandan los cánones del marketing. Tampoco se ha buscado que sea más de lo que es. Por eso se llama sencillamente Encuentro Intergeneracional y consiste en una tarde de convivencia entre las diferentes generaciones de vecinos del valle de Kuartango. Este año es el quinto que se celebra. Juan Ramón Etxebarria, el párroco de la zona y responsable de Cáritas, cuenta que "los mayores nos veníamos reuniendo para charlar, pasar el rato y un día vivieron los chavales que hacen aeróbic y propusieron hacer una actuación para los mayores. No sólo nos pareció bien, sino que les propusimos hacer un dueto: ellos nos mostraban sus bailes y nosotros hacíamos otra cosa, como contar historias o cantar".

La historia se fraguó así. Aquel primer año se lo pasaron fenomenal y al año siguiente se volvió a repetir, pero ya con la presencia de los padres de los críos y poco más tarde con gente en general del valle que acudió para pasarlo bien, porque el encuentro está abierto a todos. Ahora, el Encuentro Intergeneracional es un momento especial en el Valle: "un proyecto de integración de todas las generaciones, desde los niños de tierna edad hasta abuelos de 100 años".

Para este año se ha elegido el próximo sábado día 14, a partir de las 18 horas, la celebración de esta cita. En el programa se repite prácticamente lo mismo que entonces: actuaciones del grupo de baile de Kuartango, grupo de danzas vascas, el baile de las niñas y niños de Kuartango, las coreografías del grupo de aeróbic y el recital del coro del Valle, además de las historias del grupo de mayores.

"Los mayores no sólo reciben lo que les ofrecen los más jóvenes", cuenta Etxebarria, "también cantan y cuentan, porque al mismo tiempo que interpretan algunas canciones también rescatan de la memoria el cómo. Por ejemplo, las canciones en las romerías, que iban de pueblo en pueblo, y que muchas veces tenían elementos picantes o bromistas".

Etxebarria explica que, al margen de reunirse en torno al arte y la actuación, pretenden mostrar algo más: "Que las diferencias generacionales no son insalvables y que en Kuartango es posible reunirnos alrededor de un objetivo y hacer cosas en común. Podemos compartir entre todos, podemos aprender unos de otros, podemos enriquecernos. Lo pasamos bien, nos reímos y disfrutamos"

De esta forma se ha ido pasado de un grupo de mayores que se reunía a encuentros que concilian a más de 200 personas. Este año, además, se ha decidido grabar una película del encuentro.