oion - La ikastola San Bizente de Oion está sudando la gota gorda ante los intentos del Ayuntamiento de esa localidad, gobernado por el Partido Popular, para retirar por decreto la ayuda económica anual que hace posible buena parte de su mantenimiento. Casualidad o no, lo cierto es que ese ataque contra la escuela vasca se suma a los intentos del delegado del Gobierno por amordazar el euskera en las contrataciones en la comarca de Zuia, circunstancia que se debatirá en breve en un Pleno de las Juntas Generales de Álava.

El último episodio de la guerra de nervios que se viene manteniendo desde hace más de un año se produjo ayer, tras un encuentro de los representantes de la ikastola, Fosi Faces y Gema Berzal, con el alcalde, Rubén Garrido; el teniente de alcalde, Agustín Hervías, y el secretario del Ayuntamiento. Según el centro educativo, "tras la reunión mantenida hoy -por ayer- con el alcalde de Oion parece ser que, ante las reuniones efectuadas con los grupos de la oposición, van a cumplir con el convenio como hasta ahora. En cualquier caso esa voluntad está condicionada a que puedan demostrar la ilegalidad o no del convenio. Así pues, la situación ha mejorado pero la actitud del alcalde y del equipo de gobierno sigue siendo la misma. Incluso dice que aunque sea legal puede ser irresponsable, por lo que la convocatoria para concentrarse frente al Ayuntamiento el miércoles 14, a las 19.45 horas sigue en pie. Recordamos que queremos que sea una concentración silenciosa, pacífica, sin pancartas ni gritos. Lo que queremos es que se vea que en Oion la ikastola es parte fundamental en el tejido social y cultural. Lo ha sido durante los últimos 36 años y queremos que lo siga siendo. Os animamos a todos a participar con vuestra presencia y vuestro silencio".

Hace 14 años, el Consistorio que presidía entonces Alberto Ortega (PNV) firmó un convenio con la ikastola para poder mantener ese centro en Oion. El documento reunía todas las garantías jurídicas, se aprobó en un Pleno, incluso con los votos del PP, y se firmó por un plazo de 50 años. En él, la Corporación se comprometía a subvencionar cada ejercicio con un importe de 73.000 euros y así ha estado funcionando desde que comenzó el nuevo milenio. Sin embargo, la crisis también se ha dejado sentir en la ikastola y los tres últimos ejercicios han sido delicados, ya que se han registrado algunas pérdidas y la cancelación de cualquier ayuda puede ser el remate de ese centro.

Y si la situación económica era mala, lo peor llegó cuando comenzaron a filtrarse mensajes de que la Corporación podría estar tratando de cancelar esa ayuda, supuestamente para racionalizar el gasto público. Se comenzó con la presión cuando la oposición en el Ayuntamiento de Oion se negó a aprobar el proyecto de Presupuesto para 2013. Entonces surgió la primera amenaza en boca del alcalde. "Si no apoyáis el Presupuesto que hemos traído peligrará la partida de la ikastola". Y así fue.

A partir de ese momento desde el PP de Oion se comenzó una operación de acoso y derribo contra ese baluarte de la cultura vasca. Se buscó hasta debajo de la tierra algún informa oficial que dijera que el acuerdo de una sesión plenaria, como es este caso, era ilegal, irregular o denunciable. Pidieron un informe al Gobierno Vasco y a la Diputación Foral y el ambos casos señalaron que no veían ilegalidad ninguna en el acuerdo. De hecho, el Gobierno Vasco informó que conocía desde hace tiempo el acuerdo y nadie lo había cuestionado.

Perdidos los nervios, Rubén Garrido se atrevió a amenazar en una comisión informativa que estaba dispuesto a suspender el acuerdo a través de un decreto de Alcaldía. Quizás ése fue el punto de inflexión. Jokin Villanueva, portavoz del PNV en el Consistorio, le tuvo que contestar que si se atrevía a hacerlo su grupo le pondría una denuncia por prevaricación, por lo que el primer edil que suavizar su postura. Y es que un acuerdo de Pleno, por ley, no se puede suspender con un decreto de Alcaldía. De esta forma, al alcalde no le quedó otra que anunciar que buscaría un informe en contra del acuerdo y en ésas sigue.

De momento, la ikastolas ha decidido protestar pacíficamente mañana delante de la Casa Consistorial mientras se celebra el Pleno. Sin gritos, ni colores políticos, los oioneses mostrarán su rechazo a los ataques contra la ikastola.