gasteiz - Las asociaciones de vecinos de los barrios de Gasteiz contarán en 2014 con 177.500 euros para financiar sus actividades y fiestas, una cantidad ligeramente superior a la del año pasado, cuando estos colectivos, por primera vez, tuvieron que conseguir mediante ingresos propios el 30% de la ayuda solicitada. En 2014, a petición de FAVA, el mecanismo ha cambiado; ahora sólo tendrán que recaudar un 10% de la subvención pedida, y el 20% restante lo podrán justificar mediante las horas invertidas por los miembros de cada asociación en beneficio del barrio.

Este año Zabalgana volverá a ser el barrio vitoriano con una mayor ayuda pública, de 9.462 euros, en unos tiempos en los que el gasto de las subvenciones se fiscaliza al céntimo, especialmente desde que tres asociaciones de la ciudad presentaron, presuntamente, facturas falsas para quedarse con dinero público en 2012 y 2013.

Las cantidades recibidas son directamente proporcionales a los gastos que la asociación pretende realizar y al trabajo que estos implican, al margen de que cuanto más dinero se pide más dinero hay que recaudar mediante ingresos propios, según el nuevo baremo establecido hace dos años. Así lo explica Esther Fernández, presidenta de la asociación Bizilagun de Coronación. "Este año ha sido un poquito más difícil hacer las cuentas, si tenías un gasto de cien euros sólo te subvencionaba el Ayuntamiento setenta, y los otros treinta los tenías que sacar tú, y en la medida en que la cantidad es mayor te tienes que mover más para financiarte", asegura Fernández, quien afirma que el hecho de poder justificar la subvención por horas trabajadas sin duda les beneficiará. "Con las horas que metemos en la calle nos tendrían que dar mucho dinero", señala la presidenta de Bizilagun, consciente, por otro lado, de que "si quieres gastar más te lo dan hasta un tope, siempre que lo puedas justificar, y cuanto más quieras gastar más tienes que justificar".

Por su parte, Javier Fernández de Betoño, presidente de Aranako, cree que "considerar el trabajo de la asociación como parte de la subvención va a acarrear bastante polémica".

En todo caso, para las asociaciones concurrir a las ayudas municipales no supone ningún problema porque llevan ya muchos años haciéndolo. Esther explica que "es algo sencillo, se presentan las facturas, se justifican los gastos y el dinero que sobra se devuelve. A nosotros -continúa- siempre nos ha sobrado alguna cantidad, el año pasado 800 euros, y este año nos dan menos (pasan de percibir 5.798 euros a 5.288) porque también hemos pedido menos; no nos compensa andar con dinero público para luego tener que devolverlo". Esther está de acuerdo en que el Ayuntamiento fiscalice exhaustivamente su actividad, pues "se debe controlar a todo el mundo cuando se trata de dinero público, también a los políticos".

Javier coincide. "Antes, cuando llevaba el tema el Departamento de Cultura, había un poco de manga ancha, no se fiscalizaba tanto como ahora", explica el presidente de Aranako, quien señala que "ahora hay que hacerlo todo con facturas, luz y taquígrafos, y me parece perfecto, si no se recauda no se pueden dar subvenciones".

En cuanto a los proyectos a los que se destina el dinero, Javier Fernández de Betoño señala que en Arana principalmente se gasta en la organización de las fiestas del barrio, evento que el año pasado les costó un buen susto. "El Ayuntamiento nos quiso cobrar la ocupación de espacio público de las barracas; este año cada uno se tiene que buscar la vida, así que no sé si les merecerá la pena venir", explica.

En Coronación, por su parte, la subvención se invertirá en colaborar con los seis grupos de teatro del barrio, a los que "se les puede dar 600 euros", señala la presidenta de la asociación, que también ha dado una ayuda de 500 euros a cada uno de los tres restaurantes que "tienen flores en las ventanas durante todo el año". Se trata de que el barrio luzca bonito, de que los vecinos vivan a gusto y de que poco a poco se acabe con el estigma que asocia esta zona con "un gueto".

por barrios Tras Zabalgana, el barrio que recibirá en 2014 la ayuda más cuantiosa es Salburua, cuya asociación, Burdinbide, contará con 9.076 euros, frente a los 6.189 de 2013. Ipar-Arriaga y Kaleartean, con 8.998 euros, son las siguientes asociaciones que más dinero perciben, y les siguen Judimendikoak (8.766), Errekatxiki (8.303), Gure Auzune (8.148), Aranako (8.100), Zazpigarren Alaba y Gazteluen Auzoa (7.916 euros), Adurtzakoak y Txukun-Lakua (7.452), Bizigarri (7.298), Gasteiz Txiki (6.525), Txagorribidea (6.465 euros), Uribe Nogales (6.215), Gure Gordelekua (5.829), Zaramagatarrak (5.733), Errota Zaharra (5.674), FAVA (que aglutina a 13 asociaciones de todo el territorio y percibe 5.500 euros), Bizilagun (5.288), Zona Sur Olarizu (3.664), Cauce Vecinal (3.201), Hegoaldekoak (3.000), Miguel de Unamuno (2.000), y Los Arquillos Bizirik, que recibirá en 2014 1.600 euros.