gasteiz - A partir de hoy, Mariturri cuenta con 68 plazas para los niños y niñas que dan los primeros pasos en su educación. Ayer, miembros de todos los grupos municipales, con el alcalde Maroto a la cabeza, se desplazaron hasta el barrio más joven de Gasteiz para inaugurar la nueva haurreskola, en un acto en el que el primer edil ensalzó la colaboración interinstitucional, e incluso de la oposición municipal, para hacer realidad el proyecto y dar satisfacción a las demandas de los vecinos del barrio, que ya cuenta con cuatro de estas guarderías. El problema es que los vecinos no están satisfechos, porque en Mariturri, y en todo Zabalgana, los equipamientos están llegando mucho más tarde que los vecinos y por ello los niños mayores de un año tienen que emigrar para poder recibir la educación gratuita a la que tienen derecho.

Al barrio se incorporan todos los años más de 500 recién nacidos, y por mucho que Gobierno Vasco, Ayuntamiento y partidos trabajen para sacar adelante infraestructuras como la inaugurada ayer, la oferta es incapaz de satisfacer la demanda. El año que viene el 43% de los niños de 2 años del barrio se tendrá que matricular en otras zonas de la ciudad. La consecuencia es que el distrito no se vertebra desde la base, porque los pequeños se relacionan con sus compañeros de colegio, que no son los mismos que los del barrio.

Hay otra consecuencia que se deja ver todos los días en las calles de Zabalgana. Decenas de madres y padres dejan pasar autobuses urbanos por la sencilla razón de que no caben con las sillas de sus hijos. Además, centenares de coches privados se dirigen cada mañana al congestionado centro de la ciudad para llevar a los niños al cole.

Todos estos argumentos quisieron exponer ayer al alcalde y a los grupos municipales un grupo de padres y madres que reclama poder educar a sus hijos en su propio barrio, como dicta el sentido común y como siempre se ha hecho. "Este es un barrio joven, con 538 nacimientos en 2012, y sólo se ofrecieron 123 plazas. Hay más de 400 niños que se han quedado sin aula o se han ido a colegios concertados o fuera del barrio, y al año siguiente hubo más de 700 nacimientos según el censo del Ayuntamiento", explicaba Javier Busto, uno de los padres que ayer se dirigieron a los responsables municipales durante la inauguración de la haurreskola de Mariturri.

Lo que piden estas familias es que el colegio que ahora mismo es únicamente un proyecto, y que se construirá junto a la haurreskola, sea más grande de lo previsto inicialmente, una posibilidad que el propio proyecto contempla. A Unai Sierra, otro de los padres afectados, le parece algo lógico. "Hay que hacer un colegio en condiciones porque cada vez nacen más niños y seguimos sin tener plaza", expuso.

La Asociación por un colegio del barrio a la que representan, y que reclama un centro "público, laico y euskaldun", critica que la situación actual "no es nada sostenible para una ciudad que pretende ser verde", ya que el Gobierno Vasco les ha ofrecido la posibilidad de llevar a sus hijas e hijos a Ariznabarra, o a centros como San Ignacio, que está en Adurza pero que les corresponde por zona, y al que se tarda cincuenta minutos en llegar caminando.

Ayer, Maroto reconocía que la demanda de un centro escolar es unánime en Zabalgana, pero aseguraba también que los políticos hacen todo lo que pueden. "Hay que seguir trabajando para que los padres y madres que quieran tener a sus hijos en una escuela del barrio lo puedan hacer, esto es sólo un paso más en un camino que tiene que seguir con su recorrido, pero a pesar de la crisis económica hemos cumplido. Aquí está la prueba de que con consenso político se consigue cumplir con el compromiso de habilitar una escuela donde hay demanda", resaltó el alcalde, quien cree que el simple hecho de tener excavadoras en marcha ya tiene su mérito.

petición razonable "Hay que ser conscientes -explicó- de que en Vitoria se están construyendo equipamientos educativos, cosa que en otros municipios no, hay ciudades donde no hay ni una obra civil abierta. Yo entiendo que la petición de los padres es razonable, todo el mundo quiere los equipamientos desde el primer día, pero también es razonable entender que estamos realizando un esfuerzo ímprobo, a veces con recursos que todavía no existen", afirmó el alcalde, quien aseguró que la planificación del Ayuntamiento y del Departamento de Educación del Gobierno Vasco para dotar de plazas escolares al barrio es adecuada. "Hay que planificar primero para construir después", señaló el primer edil.

Por lo pronto, el barrio cuenta con una nueva haurreskola que hoy recibirá a sus primeros once bebés, y que paulatinamente irá acogiendo a más niños. Así, para el próximo curso ofrecerá el total de sus 6 aulas, dos de ellas preparadas cada una para hasta 8 niños y niñas de 0 a 1 años, y otras cuatro aulas habilitadas para educar a hasta 13 menores de 1 a 2 años.

Zabalgana. Es el segundo barrio más poblado de Vitoria, tiene una edad media de 30 años y cada curso más de 500 nuevos recién nacidos incrementan su número de habitantes.

Centros escolares. El barrio cuenta con dos colegios, el de Zabalgana y el de Mariturri, éste último formado por módulos prefabricados.

Javier, padre de una niña que nació en 2012 y no tiene plaza para el año que viene en el barrio, expuso ayer su situación al alcalde de Gasteiz.

Unai, otro padre afectado, apuesta por construir un nuevo colegio con más plazas de las proyectadas inicialmente.

43%

De los menores de Zabalgana que ha pedido plaza en aulas de dos años tendrá que ir a un centro de fuera del barrio.