mertxe acudió a primera hora de la mañana de ayer a su farmacia habitual para recoger varios medicamentos para sus padres y sólo con presentar la Tarjeta Sanitaria (TIS) de ambos logró cumplir el trámite. "Han visto que son pacientes crónicos y al momento me han dado todo lo que necesitaba. Me ha parecido mucho más cómodo que antes", aseguraba esta gasteiztarra, sorprendida por el enorme revuelo mediático generado a su alrededor. No era para menos, porque Mertxe se había convertido sin esperarlo en una de las primeras vecinas de Gasteiz en estrenar la receta electrónica, el moderno sistema de prescripción de fármacos que hoy, por fin, culminará su despliegue por todos los rincones del territorio histórico.
Sólo Vitoria faltaba por subirse al carro de la e-rezeta, tras una implantación progresiva que arrancó hace más de año y medio en el barrio de Abetxuko y que poco a poco ha ido incorporándose a toda la zona rural de la provincia. Así que allí, en la botica de Mari Cruz Carrascal, en el corazón del barrio de San Martín, se encontraban también entre otras autoridades el lehendakari, Iñigo Urkullu, o el consejero vasco de Salud, Jon Darpón, para saludar al flamante sistema, que estará implantado en toda la CAV antes de que concluya el presente 2013.
La receta electrónica llegó a lo largo de la jornada a 40 farmacias de las 75 que tiene Gasteiz y a siete de sus 14 centros de salud. Hoy será el turno del resto, con lo que cerca de un millón y medio de ciudadanos vascos podrán beneficiarse ya de ella. El sistema, entre otras ventajas, permitirá decir adiós progresivamente a las clásicas recetas de papel, lo que dará a los pacientes y a los profesionales un plus de comodidad, evitará duplicidades e interacciones entre medicamentos y garantizará la correcta dispensación de éstos al tramitarse todo electrónicamente, lo que minimiza los fallos de identificación.
Al otro lado del mostrador, Irune Palacios tuvo una jornada movida, de intensa pedagogía con sus clientes, al igual que sucedió en el resto de farmacias de Gasteiz a las que llegó la e-rezeta. "Hasta que la gente no entregue todas las recetas de papel no se les activará la receta electrónica", advertía la profesional, haciendo hincapié en este importante detalle. No en vano, la mayoría de los pacientes crónicos que residen en la capital alavesa todavía acumulan en sus casas recetas tradicionales con medicación para varias semanas más que en ningún caso deberán tirar. Cuando éstas se les acaben, ya podrán comenzar a utilizar el nuevo sistema, con el que basta con presentar la TIS dotada de banda magnética en la farmacia. Quienes tengan tarjetas viejas, sin esa banda, deberán solicitar una nueva en su centro de salud, como ya adelantó este periódico hace unos días. Mertxe fue, curiosamente, una de ellas. "Me van a agilizar el trámite y me la van a cambiar pronto", aseguraba.
Hoja de tratamiento La hoja de tratamiento que el profesional sanitario entrega a los pacientes crónicos servirá a partir de ahora como guía para saber qué medicamentos puede y debe recoger cada uno en su botica. El farmacéutico, entretanto, conocerá en todo momento qué puede y qué no puede dispensar con sólo echar un vistazo a la ficha de cada paciente en su ordenador. "Creo que va a ser más cómodo y más seguro, aunque estamos viendo que ahora el sistema va algo más lento", reconocía Palacios. Nada que ver, sin embargo, con el trasiego que supuso a los profesionales la aplicación del copago farmacéutico, que debió hacerse prácticamente de un día para otro. "Fue lo más duro, porque en cosa de minutos se cambió la manera de facturar todo", advertía.
Tanto Urkullu como Iñaki Betolaza, director de Farmacia del Gobierno Vasco, y también el presidente del Colegio alavés de Farmacéuticos, Pedro Rivero, aprovecharon la ocasión para celebrar la llegada de la e-rezeta a Gasteiz. "Abordamos un nuevo modelo de gestión, más cómodo y seguro para los usuarios y más eficaz para el sistema y para las farmacias", se felicitó el lehendakari. "A la gente mayor le daría un mensaje de tranquilidad, porque con este sistema todo son ventajas. Lo único que el paciente debe tener presente es que tiene que llevar su TIS encima, porque ésa es la garantía de acceso al medicamento", advirtió Betolaza. Para Rivero, que siguió de cerca la implantación de la e-rezeta en Gasteiz, el de ayer fue un día feliz porque el sector, tras muchos meses de trabajo y preparación, ha logrado un objetivo estratégico. "Estamos donde queríamos estar", aseguró el presidente del Colegio. A pesar de que la gran mayoría de las dispensaciones de fármacos fueron ayer todavía con papel, todas las farmacias que se incorporaron al nuevo sistema tuvieron al menos una dispensación electrónica y no se apreciaron errores importantes, al igual que ha ido sucediendo durante los últimos meses en el resto de las farmacias de la provincia. "En general ha funcionado todo muy bien, salvo algún pequeño problema sin relevancia", remarcó Iñaki Betolaza. "De momento todo ha ido bien", aseguró Rivero, "muy satisfecho" por la llegada de un sistema lleno de ventajas. "A partir de ahora no va a haber más diferencias que la comodidad de dejar el papel y de no tener que ir al médico cada vez que se necesite un medicamento", ejemplificó Rivero.
Valgan como referencia los datos hechos públicos ayer por la consejera de Salud de Andalucía, María José Sánchez Rubio, aprovechando el décimo aniversario de la implantación de la receta electrónica en esta comunidad, la primera del Estado que dio el paso. Los centros sanitarios andaluces han realizado hasta ahora 674,6 millones de recetas electrónicas, lo que ha permitido ahorrar 52,5 millones de consultas en los centros de atención primaria y, por tanto, millones de desplazamientos evitables para un número tan importante de pacientes crónicos.
La farmacia de Dolores Lobo, ubicada también en San Martín -junto al centro de salud de Gazalbide-, fue otra de las boticas encargadas de estrenar ayer el moderno sistema. A media mañana, Lobo aseguraba que el día estaba transcurriendo "muy bien", gracias sobre todo a la buena labor informativa que tanto ella como sus compañeras han ido realizando a lo largo de las últimas semanas. Y también, a las reuniones y cursos de preparación que han tenido a nivel profesional para adaptarse a la e-rezeta. Ayer, además, "la mayoría" de sus clientes siguió acudiendo a esta farmacia con las clásicas recetas de papel. ¿Un sistema lleno de ventajas? "Eso dicen, pero todavía hemos hecho muy pocas", aseveraba Lobo tirando de prudencia. Por de pronto, la profesional incidía en la regla de oro que a partir de ahora deberán seguir a rajatabla los pacientes, especialmente los crónicos: "La TIS es fundamental, pero también es verdad que venimos haciendo campaña desde hace mucho tiempo". La profesional abogaba también por recurrir a la "paciencia", consciente de que a sus clientes de mayor edad les costará acostumbrarse al nuevo sistema, a pesar de su aparente comodidad. "Los cambios son difíciles", reconocía Lobo.
También se mostraba satisfecha su colega Leticia Santamaría, propietaria de una farmacia en la cercana calle Chile. "De momento está yendo todo bien. Desde luego, mucho menos estresante que con el copago", advertía la profesional. La implantación progresiva de la e-rezeta en la provincia ha servido para que los lógicos fallos hayan ido puliéndose sobre la marcha y para que el sistema llegue rodado a la capital. Para Santamaría, el sistema también traerá de la mano numerosas ventajas, aunque en su discurso también encierra cierta prudencia. "La teoría es que vamos a ir a mejor. Una cosa positiva es que no vamos a poder dispensar algo equivocado, porque con el código de barras se confirma que estamos dando lo que se tiene que dar. Además, parece que habrá menos trabajo burocrático, aunque eso lo iremos viendo porque todavía es muy pronto", recalcaba la farmacéutica. A su botica llegaron ayer, incluso, pacientes con varios medicamentos en receta clásica y otros ya con el nuevo sistema, una situación "inusual" que con el paso de los días se irá corrigiendo. También, a buen seguro, tener que ver TIS "viejas no, sino prehistóricas".