vitoria. El Jardín de Falerina volverá a abrir sus puertas el 5 de octubre, y lo hará con imagen y nombre renovados. Hor Dago! Jardín de Falerina Lorategia recordará a la típica tasca tradicional vasca, pero con un aspecto actualizado. Los responsables de esta nueva etapa de la cafetería municipal, el equipo conformado por el restaurante donostiarra A Fuego Negro y la sala gasteiztarra Jimmy Jazz, siguen adelante con la reforma del local, cuya principal novedad es que la cocina ha triplicado su tamaño, de ahí que pronto se puedan ofrecer pintxos, raciones y ensaladas al mediodía y por la noche. El nuevo jardín afronta ya la recta final hacia su inauguración.
El Jardín de Falerina cerró sus puertas tras las fiestas de La Blanca. Este paso supuso también el cambio en la gestión, después de que el tándem formado por A Fuego Negro y Jimmy Jazz se impusiera en el concurso municipal. Los nuevos gestores han preparado su desembarco con unas obras para dar un aire renovado al local; y las principales novedades son el cambio de la barra, que ahora se ubicará a la derecha, la ampliación de la cocina -que triplica su anterior tamaño y, por ello, absorbe el espacio que antes también ocupaba la barra- y ese nuevo aspecto de tasca antigua alavesa, como "la que tenemos guardada en la memoria de cuando éramos pequeños", cuenta uno de los hosteleros, Edorta Lamo.
Este alavés, responsable del restaurante de pintxos donostiarra A Fuego Negro, regresa con este proyecto a Vitoria. Y lo hace, en el apartado gastronómico, con el objetivo de aprovechar "lo nuestro" pero con un afán innovador. Hor Dago! ofrecerá chorizo, jamón, queso y foie, pero también pintxos -en torno a 3 euros-, ensaladas -individuales, a 3 euros- y raciones -entre ocho y 12 euros-. En cuanto a la bebida, habrá espacio para el vino de Rioja Alavesa pero también para el cocktail.
Además, el bar ofrecerá un menú degustación, pero estará reservado para un lugar privilegiado. Aunque habrá mesas altas y de merendero, Hor Dago! tendrá una mesa destinada a unos pocos comensales en la que se servirá el menú degustación. El resto de los clientes, mientras, pagarán su comida en la barra y obtendrán sus bebidas y un ticket que, cuando llegue su turno, deberán canjear en la propia cocina.
Eso a la hora de comer y beber, pero también se quiere cuidar el aspecto cultural, de ahí la participación del responsable de la sala Jimmy Jazz. La nueva gerencia se compromete a ofrecer conciertos de diferentes estilos, desde rock a folk, rap, bertsos o jazz, y también una sesión de DJ cada fin de semana.
Lamo confía en que, con esta oferta combinada de vieja/nueva cocina y cultura, la cafetería del centro cultural Montehermoso cumpla con "las expectativas". Este espacio municipal habrá conocido cuatro gestores diferentes desde febrero de 2010, y ahora ha dado un nuevo envite con Hor Dago!