Vitoria. Poco a poco las demandas para hacer vida de barrio en los nuevos distritos de Salburua y Zabalgana se hacen realidad. Un ejemplo de ello se constata con las solicitudes para abrir un bar o un comercio en estas zonas de la capital alavesa, que a falta de cuatro meses para acabar el año, ascienden a un total de 19, frente a las 43 del pasado año, lo que representa un descenso del 56% en la cifra de licencias concedidas por el Consistorio gasteiztarra.
Lo que también varía en este ejercicio es que ninguno de los dos barrios lidera esta vez la lista de establecimientos que quieren abrir por primera vez la persiana. Según los datos del registro municipal, Zabalgana no copa el primer puesto en el podium de concesiones, como pasó con las 33 de 2010, ya que en este 2011 la diferencia entre ambos se ha reducido a la mínima expresión, con las 9 que tiene en comparación con las 10 de Salburua. "Aunque estas licencias han sido presentadas y concedidas no significa que estos locales estén abiertos en estos momentos, porque puede que alguno esté todavía en obras", insisten fuentes municipales.
Cuando acabe el año se podrá hacer un análisis más exhaustivo de las estadísticas para saber la especialización exacta de estos nuevos negocios, ya que, como dato, hasta ahora sólo se puede saber que de las 9 concesiones de Zabalgana, 3 pertenecen a la hostelería, 2 a comercios, mientras que otras 4 están sin detallar. Lo mismo pasa en las aperturas de Salburua, cuyo cómputo global de 10 está sin diferenciar.
Más exhaustivo fue el análisis de los nuevos negocios de 2010, que incluso varían en función del departamento municipal que las tramitó. En el caso de las que se derivaron a Edificaciones, 13 fueron los comercios que pidieron abrir en el barrio que encabeza la expansión de la ciudad por el oeste (Zabalgana) y 4 en el que hace lo propio por el este (Salburua). Unos números que cambian si la lupa se pone en el área de Medio Ambiente, en el que en Salburua fueron 4 los comercios que se pusieron por primera vez tras el mostrador y 2 en el caso de la barra de los establecimientos hosteleros, mientras que en Zabalgana fueron 5 los comercios y 15 los locales hosteleros.
censo de tiendas Precisamente, Zabalgana, junto con el Casco Viejo y Zaramaga lograron por sí solos tirar del sector comercial en 2010, que vio entonces un panorama un poco más esperanzador que el que dominaba el horizonte de las ventas desde 2007, año en el que la crisis se ancló en el territorio histórico.
El pasado ejercicio concluyó con un censo de comercios que casi rozaba los 3.000. En concreto, 2.962 (27 más) que un año antes. La diferencia apenas era perceptible, pero imponía un cambio de tendencia interesante que se reitera en cada rama comercial, salvo en la conocida como comercio mixto (bazares y similares), que vio decrecer su nómina de integrantes en un establecimiento.
Según el Informe de Conyuntura del Comercio Minorista, elaborado por el Ayuntamiento de Vitoria en dicho periodo, las zonas y polígonos gasteiztarras que lograron apuntalar sus estratos terciarios con la apertura de nuevos negocios fueron Zabalgana, con las cifras que se han mencionado anteriormente, y la zona que engloba al Casco Viejo -beneficiada por las políticas municipales para la reactivación de una de las zonas históricamente más depauperadas de la capital alavesa-, que empieza a ver cómo sus decenas de lonjas vacías encuentran negocios que quieren dar vida a la almendra. Así, el sector acabó el pasado ejercicio con siete tiendas más de las que había cuando comenzaba el mes de enero.
Además, el barrio de Zaramaga aportó seis nuevas aperturas, todas ellas localizadas en un gigante comercial del calado de El Boulevard, que asistió el pasado año a una revitalización de sus estructuras, circunstancia que se encargó de reducir aún más el número de locales que no albergaban negocio alguno en el recinto enclavado en el Portal de Gamarra.
Por su parte, la conocida como milla de oro, supo añadir cuatro establecimientos a la nómina de tiendas existentes en la capital alavesa. De hecho, las calles del Centro y del Ensanche tienden a asistir a una rotación de establecimientos por sus lonjas, que son las más apetecidas de la urbe gasteiztarra. No obstante, la revitalización terciaria no se comportó de igual manera en todos los barrios. Es más, durante 2010 hubo zonas eminentemente comerciales, como el entorno de la calle Gorbea, que sufrieron las consecuencias de la crisis peor que nadie. De hecho, hubo ocho tiendas que tuvieron que colgar el cartel de liquidación total por cierre.
En materia de tipología, los comerciantes de la capital alavesa se decantaron por los negocios especializados en alimentación y en equipamientos para personas (es decir, de ropa y similares y muebles y menaje de hogar). La rama más primaria de la actividad concentró el 26,7% de los establecimientos capitalinos hasta llegar a la cifra de 792 negocios (como panaderías, ultramarinos, frutería, carnicería, pescadería o supermercados). Aparte, las tiendas de textil, calzado y hogar aportaron cada una de ellas un 20% del total.
