vitoria. Las previsiones de generación de empleo del BAI Center se tambalean en el nombre de las matemáticas. Todas las voces que han manifestado su rechazo al proyecto tal cual está planteado ahora, tanto dentro como fuera del Ayuntamiento, cuestionan que la construcción del triple equipamiento vaya a conllevar la creación de 2.643 puestos de trabajo porque el pago de esas nóminas "superaría en casi cien millones de euros" el coste de las obras. Una realidad que, de ser cierta, ninguna empresa con sentido común estaría dispuesta a asumir porque el resultado final para ella sería de déficit.
La creación de trabajo es uno de los pilares que el gabinete de Patxi Lazcoz ha erigido para defender su BAI Center. Pero tanto los grupos del PP, EB y EA, como la Federación de Vecinos de Vitoria y Álava (VVA), no dudan en poner en entredicho la veracidad del número de puestos laborales contemplado en el informe de viabilidad encargado por el equipo de gobierno socialista. Si se multiplican los 2.643 empleos previstos durante las obras por los 48 meses que éstas van a durar por un sueldo medio aproximado por operario de 2.000 euros -el habitual en estos casos-, el resultado es elocuente. La constructora se dejaría en salarios un total de 253.728.000 euros, cuando el coste del centro internacional está calculado en 157 millones de euros.
Además, aunque al final una carambola matemática diera la razón al actual alcalde, VVA considera que el empleo que genere el BAI Center durante las obras no ayudará a reducir los 18.000 parados de Vitoria. La federación vecinal sostiene que la UTE encargada del proyecto emplea habitualmente cuadrillas de fuera del territorio, por lo que no le duelen prendas al acusar al gobierno de "demagógico". En la misma línea se pronuncia sobre las previsiones futuras del edificio, que estará listo en torno a julio de 2014. El gabinete Lazcoz siempre ha dicho que habrá 409 trabajadores para el mantenimiento anual; una cifra que de nada le vale al colectivo, puesto que está plenamente convencido de que el centro internacional arrastrará números rojos e hipotecará la ciudad ad eternum. Sus impresiones se sustentan en el mismo informe de viabilidad que habla del empleo.
Para que el BAI Center empiece a dar beneficios a partir del cuarto año de su inauguración, deberá acoger siete eventos a la semana entre el área expositiva, la congresual y la musical, y rozar el lleno en los conciertos. Una actividad frenética que, a juicio de todos los grupos de la oposición -incluido el PNV de Gorka Urtaran- y de VVA, es irreal.
