Vitoria. Una ciudad compacta. Ése es el gran objetivo que guiará el diseño del Plan General, el documento que regirá la expansión de Vitoria en un futuro a medio plazo. Frente al habitual crecimiento de fronteras -es decir, hacia afuera- el nuevo régimen en el que ya trabaja la Casa Consistorial apostará por un desarrollo de la urbe dentro de su actual perímetro, revisando el suelo para posibilitar más construcciones y rellenando los huecos que separan la capital alavesa. Un rediseño hacia adentro.

Esas zonas con posibilidades de ocupación son claras. El equipo de gobierno gasteiztarra pretende, en una tarea que reconocen "inmensa", unir el barrio de Sansomendi a Vitoria, conectar Salburua y Arana, así como acercar Abetxuko al anillo verde y a la propia urbe. Además, el gabinete Lazcoz también pretende rediseñar los nuevos barrios para que alberguen más suelo residencial. La medida afectará a sectores de Salburua, Zabalgana, Aretxabaleta-Gardelegi y Esmaltaciones, una vez que se acabe su ansiada descontaminación.

Estas líneas del Plan General, así, suponen un cambio radical con respecto al documento que se realizó tras la época Cuerda. Entonces, la necesidad de la urbe era contar con más suelo residencial para hacer viviendas. En este caso, VPO. Ahora, sin embargo, desde el Consistorio se piensa más en definir la ciudad con lo que ya está sobre ella. En este sentido, va a ganar fuerza la fórmula del realojo de familias para aprovechar mejor el suelo.

Desde el equipo de gobierno tienen claro qué esquema no hay que seguir. El objetivo del nuevo Plan General, como ya adelantó Juan Carlos Alonso a este rotativo, es huir del modelo Lakua, que "identificaba calidad con poca densidad". El teniente de alcalde sostuvo, de hecho, que esta política ha creado solares alejados de la urbe, difíciles de conectar y poco atractivos para un comercio que ve escasas posibilidades de negocio ante la baja población.

El también concejal de Urbanismo considera el nuevo Plan General, por tanto, como una posibilidad de detectar y subsanar estos errores. En estos momentos, desde el Ayuntamiento ya se trabaja en la fase de estudios previos, la base para realizar un diagnóstico de la ciudad, que en principio se presentará entre este mes y el próximo. La meta a la hora de planificar el desarrollo de Vitoria, en cualquier caso, es doble: por un lado, preparar el Plan General en un horizonte de tres a cuatro años; por otro, determinar cuál será el suelo urbano de Vitoria durante los próximos 15 ó 20 ejercicios. En este sentido, ya adelantó que el perímetro de la capital alavesa se mantendrá en su estado actual. Porque crecer no sólo es extenderse.