Las ciudades estamos inmersas en una etapa de regeneración y digitalización necesaria para adaptarnos a una realidad cambiante que golpea con situaciones inesperadas, como la pandemia o las guerras, y con otras que, aunque conocidas, no dejan de sorprender al mundo por sus devastadores efectos. Es el caso de la crisis climática. 

Si de todo ello tenemos que sacar un aprendizaje, lo podríamos resumir en una sola palabra: anticipación. Anticiparnos al futuro en la medida de nuestras posibilidades. En el caso de la crisis climática, reforzando el sector primario y las políticas de economía circular mediante la transformación verde de nuestra industria. 

Esta reconversión green, que precisa de un cambio de visión empresarial, individual y territorial, es uno de los retos asumidos por el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz. Un desafío en el que vamos de la mano con el sector productivo y económico de nuestra ciudad. 

Proyectos como Basquevolt, el centro de fabricación avanzada de Mercedes Vitoria o el Vitoria-Gasteiz Mobility Lab son claros ejemplos de esta apuesta por la transición energética y digital. 

En este sentido, no podemos pasar por alto que la industria es un sector vital para nuestro municipio que debe avanzar en claves de modernidad y transformación; en consonancia con estos nuevos tiempos regidos por la economía verde y digital. 

Tanto una como otra forman parte del Plan de Apoyo a la Industria con el que queremos catalizar la triple transformación en la que está implicada la Unión Europea y, por ende, nuestra ciudad: la transformación digital, la transformación energética-climática y la transformación demográfica, social y sanitaria.

Pacto Verde 

El objetivo de nuestras políticas es mantener nuestro ADN industrial y evolucionar para ser un referente en industria verde, apoyándonos en los fondos europeos y en la colaboración público-privada. El Green Deal o Pacto Verde Europeo marca esta necesidad de transición a modelos productivos con un menor consumo de materiales y una menor generación de residuos. En esto es importante que las instituciones acompañemos a las empresas. 

Lo hacemos, por ejemplo, con el programa Pacto Verde con el que queremos consolidar la creación de un tejido empresarial comprometido con la gestión medioambiental y reconocer y difundir el buen hacer de las empresas locales. 

En esta misma línea, prestamos servicios avanzados de economía circular a través del Basque Circular Hub; damos asesoramiento en economía circular y energética; ofrecemos Vitoria-Gasteiz como ciudad laboratorio para empresas con proyectos tecnológicos sostenibles que quieran realizar pruebas en entornos reales; concedemos ayudas al desarrollo de proyectos empresariales así como beneficios fiscales por el uso de energías renovables y buenas prácticas medioambientales. En definitiva, abogamos por que los diferentes sectores de actividad económica dispongan de un modelo productivo compatible con los límites del planeta.

La economía circular se ha convertido en una fuente de inspiración no solo para las actuales empresas, también para muchas personas emprendedoras a quienes queremos acompañar en su aventura. Por mi experiencia profesional he vivido de primera mano las dificultades que tienen para poner en marcha su empresa. Por eso trabajamos en tres ámbitos.

Emprendimiento

El primero es una línea de ayudas de impulso de la innovación y la economía 4.0. En ella figura el ‘cheque autónomos’ ya puesto en marcha para fomentar el emprendimiento y las nuevas ideas de negocio. Va dirigido a nuevos autónomos para mejorar la supervivencia y el fortalecimiento de sus negocios. Para ello contamos con una bolsa inicial de 250.000 euros de los que se beneficiarán 260 nuevas personas emprendedoras que recibirán 960 euros a fondo perdido en un único pago anual.

Por otra parte, figura el Plan Integral de Apoyo al Emprendimiento que activará nuestra ciudad como entorno emprendedor; implicando a las empresas consolidadas en proyectos de intraemprendimiento. Y en cuanto al tercer ámbito, el de los semilleros de empresas municipales de Basaldea, Jundiz y el Centro Abierto de Empresas del Casco Histórico; seguiremos potenciándolos. Son recursos pioneros en España que nos sitúan a la vanguardia del apoyo al emprendimiento.

En definitiva, contamos con un tejido industrial preparado para asumir el desafío de la reconversión verde y para seguir dotando de identidad propia a Vitoria-Gasteiz. A ello se suma una corriente emprendedora dispuesta a contribuir en la generación de riqueza y empleo. Presente y futuro unidos en un escenario en el que el Ayuntamiento también está presente.