La pandemia campa sin control. El lehendakari, Iñigo Urkullu, ya advirtió el pasado viernes de que los próximos cinco días iban a ser "claves" para poder contener los contagios y ganar tiempo. Parecía adivino porque los datos de positividad han ido de mal en peor, con un 7,9 % el viernes, un 9,4% el sábado y un 9,7% el domingo para descender ligeramente al 8,3% del lunes.

El 7 de julio era el día fijado para haber relajado las medidas y no fue posible. En la siguiente cita, anunciada para el día 22, la situación epidemiológica tendría que haber mejorado y, sin embargo, las previsiones son muy pesimistas con una incidencia de 346 casos por cien mil habitantes, desbordando todos los escenarios del Plan Bizi Berri IV, el último en aprobarse .

Los toques de queda municipales, que ya han puesto en marcha comunidades autónomas como Valencia, siguen estando sobre la mesa. En la última reunión se planteó la posibilidad de imponer nuevos horarios de cierre al ocio nocturno, así como restringir la movilidad, estableciendo toques de queda en las poblaciones con más transmisión del virus, ya que sin estado de alarma esta limitación no se puede aplicar a toda la CAV.

Sin embargo, no hay ninguna confirmación oficial sobre este extremo ni tampoco sobre el adelanto de la mesa de crisis. El portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, aseguró ayer que "a día de hoy" las restricciones en vigor en Euskadi son las aprobadas la semana pasada, a la espera del análisis de la situación que haga hoy mismo la comisión técnica del LABI.

"Tras fijar la fecha del 22, el lehendakari insistió en que la reunión quedaba abierta y que posiblemente tampoco fuera necesario hacerlo de forma física, se podría hacer de forma virtual o de forma telefónica", explicó el portavoz, quien resaltó que "a día de hoy, el escenario es el que está aprobado y las medidas que están establecidas son las que están en vigor".

No obstante, precisó que para endurecer o suavizar restricciones no solo se tiene en cuenta la incidencia acumulada, sino que también son "elementos fundamentales; el nivel de ocupación de las UCI, la forma en la que el covid afecte a mayores de 65 años y el grado de vacunación", subrayó.

Son las cuestiones que hoy valorará la comisión de técnicos que asesoran al LABI y, según el análisis que hagan, las autoridades vascas evaluarán si es necesario adelantar el encuentro político, y si se deben o no endurecer las medidas en vigor.

"A día de hoy las restricciones en vigor son las aprobadas el pasado día 7 de julio"

Portavoz del Gobierno Vasco