En un momento de efervescencia y debate sobre qué energías tienen que liderar la transición ecológica y la descarbonización, Imanol Pradales no ha querido alimentar ninguna pugna y ha apostado este jueves con claridad por el mix energético, por una combinación de esfuerzos donde todas las tecnologías van a ser necesarias, ya sean el hidrógeno, la electricidad u otras fuentes. Desde Gasteiz, el aspirante del PNV a lehendakari reafirmó el compromiso de su candidatura con la transición ecológica, “con ambición”, pero con “realismo”, paso a paso, garantizando en todo momento los puestos de trabajo y de la mano de las empresas. El mensaje lo trasladó en la capital alavesa, donde el PNV está multiplicando sus esfuerzos.

Tras repasar el decálogo del PNV para “Vitoria-Gasteiz capital” y ofrecer infraestructuras sanitarias y que el nuevo Plan de Seguridad comience su despliegue en las calles de esta localidad, Pradales abordó el debate de la descarbonización. “Lo hacemos aquí, en Mercedes, que ha anunciado mil millones para poner en marcha una nueva línea de fabricación de furgonetas eléctricas que garantiza los 5.000 empleos directos que hay ahora mismo, pero también la industria del futuro de Gasteiz, gracias a la colaboración de las instituciones vascas que han creado un marco fiscal atractivo para traer esa inversión”, dijo, para poner en valor el papel del PNV. Añadió que están apostando por esa descarbonización con “medidas muy diversas: mix energético”, diciendo que sí a las energías renovables y la electrificación, a aumentar la potencia de la red eléctrica vasca, avanzar en biocombustibles e hidrógeno verde. “No sobran las tipologías”, zanjó.

Pradales dijo “sí a la transición”, pero “sin ansiedades, con ambición y con realismo”. Anunció más medidas, como un nuevo clúster para avanzar en la descarbonización, incentivos fiscales; comunidades energéticas en los polígonos industriales para el autoabastecimiento de esos centros, y un modelo donde “todas las energías y tecnologías van a ser necesarias”, de la mano de la industria y protegiendo el empleo. Pradales dijo que Gasteiz debe marcar “el ritmo de las ciudades de Euskadi” y que es la ciudad industrial por excelencia, y defendió el empleo de calidad, riqueza y un tejido más competitivo.