Equipos de bomberos con apoyo de aviones apagafuegos han logrado controlar en la mañana del jueves el incendio que alcanzó anoche la central térmica en Milas, un municipio en la provincia occidental turca de Mugla. Gracias a un cambio en la dirección del viento y al trabajo de esta mañana se consiguió controlar por ahora el incendio y que el fuego dejara de avanzar, según informó la emisora Habertürk.

"Las unidades principales de la central eléctrica no sufrieron daños graves, según el examen inicial tras la evacuación de la instalación", señaló en un tuit Fahrettin Altun, jefe de comunicación de la Presidencia turca.

DEPÓSITOS DE CARBÓN

El alcalde metropolitano de Mugla, Osman Gürün, aseguró anoche que los materiales explosivos de la central térmica han sido evacuados, pero no se pudieron vaciar los depósitos de carbón, que contenían unas 40 toneladas.

Anoche las llamas provocaron explosiones en las líneas eléctricas de la central y se teme que si el lignito en los depósitos se quema se liberen enormes cantidades de monóxido de carbono. Durante la noche, vecinos de diez barrios de la zona fueron evacuados mediante barcos de las fuerzas armadas turcas.

"Hay un gran caos en Mugla. El centro de coordinación no funciona. Incluso las decisiones para evacuar no se toman a tiempo", lamentó Gürün, en declaraciones a la emisora HalkTv. La central de Milas es una planta de tamaño medio, con una potencia de 630MW que genera el 0,6% de la energía producida en Turquía.

Por otro lado, continúan los esfuerzos para apagar otros 14 incendios detectados en quince provincias del país, principalmente en la costa sur y suroeste. Desde que se iniciaron los fuegos el miércoles de la semana pasada, ocho personas han muerto, dos de ellas bomberos, casi todas en el virulento foco de Manavgat, en la provincia meridional de Antalya.

"HUMILLAR AL ESTADO"

Por otro lado, el fiscal jefe de Ankara inició este jueves una investigación por las publicaciones en redes sociales que piden ayuda internacional para Turquía por los incendios, por supuestamente generar "miedo y pánico" entre los ciudadanos.

"Se ha determinado que están tratando de humillar al Estado y al Gobierno de la República de Turquía. Por ello, la Fiscalía inició una investigación al respecto y descubrió elementos delictivos", señaló el fiscal en un comunicado.

La investigación se concentra en las 2,7 millones de publicaciones en redes sociales con la etiqueta "Help Turkey" (Ayuda a Turquía), de usuarios que se solidarizaron con los incendios y pedían ayuda internacional.