Irán probó ayer misiles balísticos tierra-tierra y aviones no tripulados de fabricación interna durante unas amplias maniobras militares en el desierto central del país. Este simulacro tiene lugar a pocos días de la toma de posesión como presidente de Estados Unidos del demócrata Joe Biden, quien ha expresado su preocupación por el programa de misiles balísticos de Irán. Mientras, Corea del Norte exhibió también su poderío militar, incluido un nuevo misil balístico para submarino, en un desfile recogido ayer por los medios del régimen y celebrado para conmemorar el congreso del partido único donde se reforzó la figura del líder Kim Jong-un.