Bruselas - “Estamos muy preparados”. Rumanía afirma que lo tiene todo listo para sus seis meses de Presidencia rotatoria del Consejo Europeo. Aunque se habló de que en un periodo tan crucial para la UE como los siguientes meses podía ser Finlandia quien tomará el control de la situación, finalmente Bucarest se enfrentará a su primera Presidencia rotatoria con un papel crucial. Luminita Odobescu, embajadora rumana ante la UE, presentó ayer en Bruselas las líneas maestras para sus seis meses de Presidencia.
Entre los temas en los que tendrá mucho que decir está la salida del Reino Unido de la UE, prevista para el 29 de marzo de 2019. Bucarest quiere “asegurarse de que los europeos, tantos los ciudadanos como las empresas, están preparados”, mientras que pide claridad a Londres. Rumanía quiere que se empiece a hablar dentro de su mandato de las futuras relaciones que mantendrán Bruselas y Londres. Ese futuro del que habla Rumanía debe servir para “reforzar el proyecto de Europa”, afirmó Odobescu. Todo ello mientras la votación del acuerdo en Westminster aún no se ha producido y Theresa May, primera ministra británica, se enfrenta a una moción de censura.
Las elecciones europeas son otro “reto” para la Presidencia. Y lo son por un momento en el que se vive el auge de la extrema derecha en todo el continente y situaciones críticas en la democracia y el Estado de Derecho en Hungría, Polonia o la propia Rumanía (en este caso, bajo gobierno de los Socialdemócratas rumanos, los mismos que liderarán la Presidencia del Consejo). La embajadora fijó la discusión para estas elecciones en la protección ante “las fake news o de la “identidad europea”.
De la situación de estos países europeos también se ha hablado en la presentación celebrada este martes en Bruselas. Odobescu afirmó sobre Hungría que tras el voto favorable del Parlamento Europeo a aplicar el artículo 7, la situación sigue siendo preliminar, con las conversaciones recién iniciadas la semana pasada. Sobre el estado concreto de la situación dentro de sus propias fronteras, la rumana no ha querido realizar ningún comentario.
Si desde Rumanía no se quieren hacer comentarios, parece que la Comisión Europea ha decidido también enterrar el hacha de guerra con Bucarest, por lo menos en lo que respecta a su Presidencia. Lo hace porque es algo que pertenece a las “relaciones bilaterales” del país con el Ejecutivo comunitario, insistió la semana pasada Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea. Rumanía tampoco ha querido hacer referencias específicas al referéndum celebrado en octubre en el país, en el que se quería blindar en la Constitución que el matrimonio entre personas de distinto sexo es el único posible.
Ante la pregunta de si tendrían medidas específicas para luchar contra la homofobia, Odobescu se refirió a las prioridades de Rumania sobre “xenofobia, antisemitismo y populismo”, sin llegar a pronunciar en ningún momento la palabra homofobia.
Impulso a las regiones pobres Rumanía es el país más pobre de los 28 Estados miembros y, como tal, otro de sus pilares será la defensa de mayor cohesión y de un impulso de las regiones más desfavorecidas del club comunitario. Para ello, la Presidencia se centrará en la “reducción de la brecha de desarrollo entre regiones”, con una mayor competitividad para las que se encuentran en peor situación.
No solo eso, sino que Rumanía aún tiene que avanzar en otros factores como la seguridad. Juncker espera que el país pueda entrar en el Espacio Schengen antes del 30 de junio de 2019, día que termina su mandato y comenzará la finlandesa. Su entrada está bloqueada precisamente en el Consejo que ahora presidirá, después de la luz verde de la Comisión y del Parlamento Europeo.
Dentro de la seguridad, concretamente en las fronteras externas, también tendrá que hablar mucho la Presidencia rumana. Por ello, Rumanía se propone como otra de sus líneas maestras “una Europa más segura”, con la “gestión de la migración y de esas fronteras externas”. Precisamente Rumanía tiene alguna de ellas, con Moldavia, Serbia y Ucrania. Aunque la situación más candente seguirá situada en el Mediterráneo o en la valla de Ceuta y Melilla con Marruecos. Es por eso que se propone una mayor colaboración con los países africanos, y hay una fecha clave para ello: la cumbre UE-Liga Árabe, que se celebrará en febrero en El Cairo (Egipto).
Guías éticas. La Comisión Europea (CE) publicó ayer el borrador de “guías éticas” para el nuevo plan de inteligencia artificial presentado por el Ejecutivo comunitario hace dos semanas en Bruselas y que entrará en vigor a mediados de 2019.
Derechos fundamentales. Entre los puntos destacados del código ético se encuentran asegurar una inteligencia artificial “centrada en el ser humano”, basada en derechos fundamentales, principios éticos y valores y reconocer que esta tecnología aporta beneficios sustanciales a individuos y sociedad pero también puede tener un impacto negativo.