Bilbao. Tras haber negociado con los partidos la activación de una ponencia parlamentaria en la que debatir un nuevo estatus para Euskadi, el PNV trabaja ya para registrar la petición de constitución de ese foro en la Cámara vasca. Fuentes parlamentarias consultadas por DNA aseguraron que la propuesta recalará en el Parlamento la próxima semana, una fecha lógica si se tiene en cuenta que el partido había apostado por poner en marcha esa ponencia antes de que finalizara el año. Será complicado forjar un consenso para alumbrar un nuevo estatus, ya que cada partido tiene en mente un modelo distinto y algunas formaciones creen, incluso, que no procede debatir ahora sobre un nuevo marco, pero al menos se han abierto a participar en la ponencia para dejar constancia de sus propuestas. Aunque el PP amagó en el último momento y por sorpresa con no acudir, la formación aclaró finalmente que participaría en la ponencia, si bien no implica que vaya a aprobar su constitución con un voto favorable. Esa ponencia alumbrará una propuesta de estatus que la ciudadanía habría de refrendar a través de una consulta en 2015 pero, consciente de las dificultades que surgirán en el camino a la hora de forjar consensos y de que los trabajos podrían no avanzar al ritmo deseado, el PNV no plantea esa fecha como un tótem. No obstante, Andoni Ortuzar calculó ayer en Euskadi Irratia que la consulta podría celebrarse ese año, "seguramente después de las elecciones municipales y forales, y antes de las elecciones autonómicas".

Para el presidente del EBB, sería entonces cuando finalizara el proceso y llegara "el momento de decidir". Hasta la fecha, el PNV no se había mostrado tan preciso a la hora de apuntar la fecha idónea para celebrar la consulta ni había acotado en tal medida los plazos teóricos para llevarla a cabo. Sin embargo, antes deberá buscar un acuerdo sobre el estatus, y ya ha dejado ver que no se conformaría con unas adhesiones mínimas. "Nadie puede poner vetos ni imposiciones y, aunque sería muy fácil imponer la mayoría abertzale que tenemos en el Parlamento, no sería bueno ni para el proceso ni para el país", zanjó ayer Ortuzar. En ese sentido, abogó por superar el consenso recabado por el Estatuto de Gernika y por sumar, por lo tanto, a la izquierda abertzale y, "en la medida de lo posible", al PP. "Aunque será muy difícil que los dos extremos estén dentro", reconoció.

Redoblar esfuerzos El burukide Koldo Mediavilla ya anunció el pasado fin de semana que el PNV redoblaría sus esfuerzos a partir del próximo año para buscar acuerdos en materia de paz y autogobierno, dos cuestiones a las que no ha podido trasladar aún los acuerdos que sí ha conseguido firmar en materia económica y de estabilidad institucional. El portavoz del Gobierno de Urkullu, Josu Erkoreka, de hecho, aseguró ayer a Onda Vasca que su gabinete ha empezado "por lo que era más urgente", en referencia a la crisis, y que una vez "encauzada la atención prioritaria a esa cuestión", Lakua duplicará sus esfuerzos de consenso en las otras dos materias.