BILBAO. Axun Lasa ha comenzado explicando que había aceptado acudir a este seminario para manifestar la "imperiosa necesidad de hacer ver" que todas las víctimas necesitan "ser reconocidas, en el grandísimo dolor" que se les ha causado "intencionadamente".
Lasa ha insistido en no diferenciar entre terrorismos, entre el "de los aparatos del Estado que han cometido atentados, y el de ETA, con tantísimos asesinatos", y entre las víctimas de ambos.
"Somos personas muy doloridas que tenemos la necesidad de la verdad, justicia y reparación", ha opinado. "Me he sentido y me siento dañada por gran parte de la sociedad, por su incomprensión del dolor, con mi hermano secuestrado, enterrado en cal viva. Me siento muy herida por no reconocer el dolor que sufrí yo misma cuando fui torturada en comisaría. Ese es mi dolor, el mío. ¡Cuántas personas más víctimas del terrorismo de ETA y del terrorismo de los aparatos del Estado estamos dolidas por esta falta de reconocimiento!. Unos reconocen a unos, otros a otros...", ha comentado.
A continuación, Lasa ha lanzado una pregunta: "¿Tan difícil es reconocer que provocaron mucho sufrimiento, tan difícil es sentir la necesidad de pedir perdón por tantas atrocidades cometidas en nombre de no se qué?. Esta petición la dirijo a todos, a la izquierda, a los dirigentes...".
"Yo, por mi parte, a todas las víctimas de ETA, les digo que de verdad lo siento, reconozco que tomé parte en muchos actos que les debieron causar heridas, no me acerqué, y me entristece reconocerlo", ha confesado la hermana de Joxe Antonio Lasa, cuyo cadáver y el de José Ignacio Zabala, aparecieron en 1985 tras desaparecer en 1983.
Por eso, Axun Lasa suspira ahora por el día en el que todos se puedan sentar a "hablar y escuchar". "Sólo vale sentarse y escuchar, sentir la necesidad de que nada tan doloroso vuelva a pasar", ha afirmado dirigiéndose, entre otros, a los políticos.
"Me duele mucho que no haya un acercamiento responsable y sincero entre los políticos, que dos años después seguimos sin ser capaces de unirnos en torno a un proyecto de paz, que nos incluya a todas las personas que hemos sufrido las consecuencias del conflicto", ha admitido.
Las víctimas de ETA y del GAL que se juntaron en Glencree, ha rememorado, eran de "muy diversas ideologías", que llegaron "con mucho dolor y mucha rabia".
"Pero todos decimos que lo que salió de allí fuera algo hermoso, y nunca hemos dicho que fuera fácil. Tampoco será fácil unirse en torno a un proyecto de paz, pero es necesario", ha concluido.
Patxi Elola ha recordado que cuando le plantearon participar en Glencree, se negó: "No tenía ganas de encontrarme con gente de otra sensibilidad. Luego me dejé convencer, y cuando convives, te das cuenta de que las sensaciones son iguales y a mí me han servido de mucho".
"Quedó bien claro que las víctimas éramos todas iguales y que el dolor nos unía", ha resumido.
Su conclusión es que "es bueno juntarse, para intentar acercar posturas". "Si uno no se sienta, no nos vamos a acercar", ha apostillado.
Elola ha opinado que para asentar la paz "hay que darle tiempo al tiempo".
"Poner fecha es como poner fechas a la solución de la crisis, es el día a día en lo que hay que trabajar por la convivencia", ha argumentado.
El edil del PSE ha expresado sus dudas ante "la proliferación de actos y encuentros para hablar de pacificación y convivencia".
"Me huelo que son claramente con objetivos políticos, en unos casos para no reconocer a la otra parte de la historia y en otros para hacer publicidad cuando no hay intención clara de avanzar. La convivencia no depende de un plan, es un trabajo de día a día", ha concluido.