Vitoria. Patxi López hizo ayer un parón en sus vacaciones estivales para cavar de nuevo en la trinchera tras la que se pertrecha electoralmente como abanderado del autogobierno ante la "invasión" competencial y la tentación "recentralizadora" que advierte tras los recortes impuestos por el Gabinete Rajoy.

A través de un artículo publicado en su blog personal bajo el contundente título de Nos plantamos, el lehendakari aseguró que su Gobierno ha dicho "basta" al Ejecutivo central porque éste no puede "pretender salir a flote pisando la cabeza de las autonomías". Especialmente las de aquellas que no gobierna el PP. Y es que, según denunció el dirigente socialista, el Gabinete popular está "ayudando a los suyos" a la hora de distribuir los sacrificios impuestos en esta diabólica espiral de crisis y recortes. "Parece que el objetivo del Gobierno Rajoy no es tanto ajustar el gasto público como recortar servicios, y de paso, tapar el agujero dejado en las comunidades gobernadas por el PP". "Y por ahí no vamos a pasar", reiteró, poniendo como ejemplo el hecho de que "a Euskadi -que se sitúa a la cabeza de contención del gasto- se le permita un endeudamiento del 11,7% para 2013, y a Valencia -que está en pleno proceso de rescate-, del 23%". "Se está castigando a los buenos gestores y premiando a los derrochadores, curiosamente del PP", insistió.

"autoritario y arrogante" Rotos sus lazos con el equipo de Antonio Basagoiti, sostén de su legislatura y artífice de su llegada a Ajuria Enea, López ya no se para en barras en su oposición frontal al Ejecutivo popular. Hace apenas dos semanas llevó a los tribunales dos recortes impuestos denunciando que invadían competencias vascas. Y ayer, López denunció que, "a los errores en las medidas adoptadas", Rajoy ha sumado también una actitud autoritaria y arrogante". "Llevamos meses asistiendo a un interminable soliloquio por parte del PP: ausencia de diálogo, imposición de medidas y Consejos Interterritoriales a los que se nos convoca sólo como oyentes", explicó. Y, en este sentido, puso como ejemplo, e incluso como "la gota que colmó el vaso" de su paciencia, el Consejo de Política Fiscal y Financiera al que el pasado martes envió a su consejero de Economía, Carlos Aguirre, y en el que el ministro Montoro propuso "cambiar por enésima vez las condiciones y los objetivos de la política económica" para "imponernos, también por enésima vez, el verdadero objetivo oculto: los recortes a de los servicios públicos universales ninguneando el autogobierno". "Esto no es serio". "No hacen caso a nada". "Ni escuchan ni tienen voluntad de negociar", y en su "obsesión recortadora invaden competencias autonómicas iniciando, por la vía de hecho, una recentralización", denunció con dureza, antes de pedir al Gabinete Rajoy que cambie "de actitud". "Tiene que reconocer nuestras competencias y permitirnos actuar con cierto margen de maniobra" porque de lo contrario, advirtió, le seguirá plantando cara. "Aplicando austeridad", pero preservando los "servicios públicos universales" en y desde el autogobierno vasco.