Madrid. Diecisiete años después de ser secuestrado por un comando de los GRAPO, (Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre), por fin el misterio que ha rodeado a la desaparición de Publio Cordón ha quedado totalmente esclarecido. El empresario zaragozano falleció 15 o 16 días después de su secuestro en el verano de 1995 como consecuencia de las heridas que sufrió al caer por una ventana de la casa de dos plantas donde se encontraba retenido, en Lyon (Francia), cuando intentaba huir. La Guardia Civil detuvo ayer en Sevilla y Cádiz a tres miembros de la banda, dos hombres y una mujer, por el secuestro de Córdón, mientras las fuerzas de seguridad españolas, en colaboración con las francesas, localizaron en Lyon la vivienda donde el empresario estuvo secuestrado.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, explicó ayer los detalles de la operación que ha permitido esclarecer por completo el secuestro, así como la localización de la casa donde Cordón estuvo encerrado en un "armario zulo cerrado con una cadena" de la segunda planta. Allí, el empresario marcaba "palotes" en la pared, detalló el ministro, para saber cuántos días llevaba secuestrado, lo que ha permitido conocer el tiempo aproximado que el empresario pasó allí encerrado.

En el armario-zulo el secuestrado escribió "1SE" precedido de siete palotes. A continuación, "2SE" y otros siete palotes, y al final solo un palote, separado de los demás. De ahí que las fuerzas de seguridad dedujeran que el secuestro se prolongó durante al menos 15 días.

Los detenidos son Vicente Sarasa Cecilio, José Antonio Ramón Teijelo y Manuela Ontanilla Galán, tres grapos veteranos. El primero fue detenido en Cádiz y los otros dos, que son matrimonio, en el municipio de Arahal, a unos 50 kilómetros de Sevilla, aunque residían en París y se encontraban de vacaciones. Inmediatamente fueron trasladados a París. En la operación, la Guardia Civil ha contado con la ayuda de un testigo protegido, que ha permitido dar por "cerrado" el caso, a expensas de la localización del cadáver del empresario en la zona del Mont Ventoux, en el sureste de Francia.

Rescate pagado Fernández Díaz reveló que mes y medio después de la muerte de Condón, los terroristas cobraron 400 millones de pesetas por el rescate del empresario, y que la detenida Manuela Quintanilla participó en este cobro. "Han estado jugando claramente con los sentimientos de la familia y engañando a la opinión pública", remarcó el titular de Interior, puesto que los GRAPO mintieron "una y otra vez" al asegurar que habían puesto en libertad a Cordón. Fundador de la aseguradora Previasa y del Grupo Hospitalario Quirón, el empresario fue secuestrado el 27 de junio de 1995 cuando corría por las inmediaciones de su casa de Zaragoza. El ministro señaló que cuando cayó por la ventana de la casa (que fue alquilada con documentación falsa por uno de los detenidos en Sevilla, José Antonio Ramón Teijelo), los secuestradores dudaron entre llevarle a un centro sanitario o dejarle morir.

En su intento de fuga, el empresario rompió la cadena del armario-zulo e intentó escapar por un balcón ventana, pero los miembros del GRAPO que le vigilaban debieron darse cuenta y en la precipitación por huir cayó al suelo y sufrió las heridas que le ocasionaron la muerte. Fernández Díaz recordó que se sabe que el cadáver fue enterrado en el Mont Ventoux y dijo tener la "esperanza" de que las detenciones aporten alguna prueba de dónde puede estar exactamente el cuerpo. El ministro reiteró que la operación sigue abierta y que por tanto podrá haber novedades en torno al secuestro.

La versión facilitada por Interior termina con las hipótesis que se han barajado durante años. La policía creyó durante algún tiempo que el empresario se había marchado de España y se encontraba en Centroamérica bajo otra identidad. Pero a la vista de lo conocido ayer, el miembro de los GRAPO Silva Sande, (que fue condenado por el secuestro), había dicho la verdad, al asegurar que Cordón murió al intentar huir tras caer de un segundo piso.