GASTEIZ. El propio consejero ha mantenido hasta el último momento reuniones con los distintos partidos para mantener o ampliar el consenso que había en torno a esta fecha en su primera edición del año pasado, pero no ha sido posible por las discrepancias planteadas por Bildu, PNV y PP.
Al no lograrse ese consenso, el Consejo del Gobierno Vasco ha acordado hoy que el lehendakari, Patxi López, leerá el jueves en el Palacio de Ajuria Enea una declaración institucional, ya que el Ejecutivo de Vitoria considera que es necesario conmemorar esta fecha.
El 10 de noviembre de 2010 se celebró por primera vez en Euskadi el Día de la Memoria, en una fecha elegida por ser, según se dijo, el único día del año en el que no ha habido muertos ni heridos por atentados terroristas, lo que llevó a las instituciones vascas a destacarlo en el calendario como una jornada de todas las víctimas y de ninguna en particular.
Hace un año las instituciones vascas celebraron plenos y actos en memoria de las víctimas, aunque estos homenajes tampoco fueron unitarios, ya que en ellos no participaron representantes de Aralar, EA, Alternatiba, ni de la izquierda abertzale, en protesta por no incluir en estos reconociientos a las víctimas de "motivación política" como las de las Fuerzas de Seguridad del Estado.
Precisamente la mención a este colectivo ha sido el detonante del desacuerdo, ya que el PP se ha opuesto a que se incluyan en esta conmemoración las denominadas víctimas de motivación política, en las que están las de los abusos policiales.
Ares ha adelantado que la declaración del Gobierno Vasco del próximo jueves hará mención a "todas las víctimas, sin equiparación" de unas con otras.
El Gobierno Vasco ha decidido mantener esta conmemoración de manera unilateral, ya que su objetivo era, al menos, lograr el mismo consenso que respaldó el Día de la Memoria el año pasado, algo que, ha lamentado Ares, no ha sido posible.
Con el mantenimiento de la conmemoración, el ejecutivo de Vitoria pretende mantener vivo el recuerdo a las víctimas del terrorismo y el relato de lo ocurrido para que no vuelva a pasar en el futuro.
El consejero de Interior ha explicado que el Gobierno no se ha planteado el aplazamiento del Día de la Memoria por la falta de consenso para que todas las instituciones de la Comunidad Autónoma lo conmemoren de manera unitaria.
Ha añadido que cada institución "hará aquello que considere adecuado" el próximo jueves y ha asegurado desconocer si alguna de ellas va a convocar algún acto.
Preguntado sobre si el Gobierno Vasco siente cierta decepción por la falta de unidad ya en la segunda edición de este día, el consejero ha explicado que el ejecutivo se ha limitado a cumplir con su responsabilidad y hacer pública una declaración, después de haber propuesto "diversos textos" a los partidos que no han sido aceptados.
Ares ha destacado que el Gobierno Vasco siempre va a "primar la búsqueda del consenso en esta materia" y que, este año, ha hecho "todo lo posible" para conseguirlo.
Ha dicho que no culpa a nadie de la faltad de consenso, pero ha insistido en que desde el inicio de las conversaciones Bildu consideró que no era el momento para entrar en un acuerdo con el resto de partidos en esta materia, y que el PP y el PNV han mostrado "discrepancias".
Esta es la segunda escenificación de desacuerdo entre los partidos vascos tras el anuncio de ETA de cese definitivo de su actividad violenta. El lehendakari también tuvo que renunciar a convocar concentraciones para saludar el nuevo tiempo por la falta de consenso.