SANTIAGO DE COMPOSTELA. Los príncipes de Asturias han recibido a las 11:30 horas de hoy en el aeropuerto de Lavacolla de Santiago de Compostela al papa Benedicto XVI, que inicia en la capital gallega su segunda visita a España.
El avión Airbus 320 de Alitalia en el que viajaba el papa Benedicto XVI había aterrizado unos minutos antes, en medio de una densa niebla, y a las once y media en punto todas las campanas de la archidiócesis de Santiago rompieron a tañer en un repiqueteo de bienvenida al pontífice.
Después de que el nuncio del Vaticano en España subiese a la aeronave para dar la bienvenida al papa, este ha descendido las escalerillas del avión y han sido los príncipes Felipe y Letizia los primeros en saludarle en la pista.
Junto a ellos se encontraban el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y los ministros de Justicia, Francisco Caamaño, y Fomento, José Blanco, además de otras autoridades, entre ellas el embajador de España en el Vaticano, Francisco Vázquez.
Además, han recibido al papa un batallón mixto de la Brigada Ligera Arerotransportable de Pontevedra (BRILAT) con un escuadrón de gastadores y una banda de música mixta de esta unidad y de la fuerza logística operativa de A Coruña.
En total, había en el aeropuerto 140 militares y un grupo de 500 personas a la derecha de la tribuna de prensa invitados por la Guardia Civil, la Xunta de Galicia, el personal del aeropuerto y la Policía Nacional.
Tras la ceremonia de bienvenida, en la que el papa y el príncipe pronunciarán breves discursos, Benedicto XVI mantendrá un encuentro privado con don Felipe y doña Letizia y, posteriormente otro con Pérez Rubalcaba.
En el avión papal han viajado, junto a Benedicto XVI, todos los cardenales españoles de la Curia romana, a los que, una vez en España se unirán los cardenales Rouco Varela (arzobispo de Madrid), Martínez Sistach (arzobispo de Barcelona), Amigo Vallejo (arzobispo emérito de Sevilla), García Gasco (arzobispo emérito de Valencia), Álvarez Martínez (arzobispo emérito de Toledo) y Carles Godó (emérito de Barcelona).
Además de los purpurados españoles, el pontífice viaja acompañado del secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, del sustituto ("número tres" del Vaticano) de la Secretaría de Estado, Fernando Filoni, y de miembros de ese departamento.
También le acompañan el maestro de Ceremonias Pontificias, Guido Marini, el médico personal, Patrizio Polisca, el organizador de los viajes papales, Alberto Gasbarri, miembros de la seguridad del Vaticano y medio centenar de periodistas, fotógrafos y cámaras de televisión.
Una vez llegado a Santiago se unirán al séquito papal el nuncio Frattini y el arzobispo de la ciudad compostelana, Julián Barrio, quien acompañará a Benedicto XVI en el "papamóvil" durante su trayecto hasta el centro de la capital de Galicia.