Los programas que presenta Jordi Évole suelen ser de una gran factura, una calidad técnica exquisita y se promocionan de una forma que engancha al espectador. Los adelantos suelen ser impactantes y consiguen su objetivo: que quieras saber qué pasa en el programa, si realmente el entrevistado, que generalmente es alguien casi inalcanzable, va a decir lo que parece o si lo que se ve es real.

Tras dejar Salvados, el periodista catalán se embarcó en Lo de Évole, programa que va a iniciar su nueva temporadaLo de Évole tras unos meses de descanso y cuyo anuncio promocional en el que desvela su regreso ha impactado a la audiencia. Y eso que no muestra ningún tema polémico, ningún entrevistado ni nunguna exclusiva. Sólo sale Jordi Évole en un gimnasio. Un Évole hinchadísimo, gordo, ejercitándose. "Sí, es él. La pandemia lo ha cambiado. Le toca ponerse en forma", aclara la cadena en el propio anuncio. Porque su imagen hace dudar de que sea él, aunque lo parece.

El propio Évole ha querido sumarse a la inquietante promoción asegurando en Twitter que sí es él pero soltando alguna pista ambigua. "No os lo perdáis, pero no os asustéis. Y os prometo una cosa: esta temporada voy a trabajar más, mucho más. EL DOBLE. Muy pronto llega la tercera temporada de 'Lo de Évole'. Poco a poco, que me estoy poniendo en forma", ha escrito el catalán. Y claro, ese "el doble" en mayúsculas ha abierto los ojos de muchos.

Efectivamente quien se ejercita en el gimnasio no es un Évole gordo ni un Évole con algún truco de edición para deformar su aspecto, sino un doble. Un hombre con tal parecido al catalán que un vídeo suyo ya había circulado por las redes hace unas semanas. Así que sí ha sido una trampa, pero ha conseguido su función: promocionar de manera impactante, una vez más, el programa de La Sexta.