MADRID - Pedro García Aguado disfruta con el programa que presenta todos los miércoles en La Sexta, aunque si se le pregunta por la posibilidad de que él viva una experiencia similar, la respuesta es negativa. Dice que no tiene ninguna motivación para vivir situaciones extremas porque ya las ha tenido de sobra.
¿Cómo es ‘La isla’?
-Muy puñetera, sobre todo para los que han querido ir allí a vivir esta experiencia. Es una isla llena de muchos peligros y también es muy incómoda. No son unas vacaciones.
Eso ya lo estamos viendo.
-En el aspecto televisivo, es un programa muy novedoso. No hay ninguna intervención por parte de la producción del programa. Toda la narración y la grabación lo llevan los participantes, desde ese punto de vista vamos viendo cómo van viviendo las adversidades.
Pero hemos visto que hay riesgo y que las adversidades se pueden convertir en un problema.
-Hay un equipo prevenido, en helicóptero a escasos doce minutos para poder solventar cualquier problema. Cualquier tipo de rescate se hace con rapidez, ellos tienen la posibilidad de avisar por un teléfono satélite para que una evacuación se dé si es necesaria.
No hay premio.
-El premio para ellos es vivir la experiencia, eso hace que todo sea muy natural. No hay pruebas para alcanzar comida, no hay juegos maquiavélicos para expulsar a unos u otros.
¿Se hubiera atrevido a vivir una experiencia similar?
-Ya te digo que no.
¿De verdad?
-Es una experiencia que tienes que querer vivirla y tienes que tener ciertas motivaciones para ello. Pongo ejemplos: Juanma quiere demostrar a su familia que es capaz; otro quería vivir una aventura en formato real; otro, ya lo ha vivido todo en su vida y quería este tipo de programa?
¿Usted no tiene ninguna motivación?
-Yo todas estas cosas ya las he vivido, no tengo que demostrar nada a nadie, no tengo que vivir situaciones extremas porque ya las he vivido, no tengo motivación alguna para ir a una isla como esa a pasarlo mal?
¿Mal?
-No tengo ninguna necesidad de vivir situaciones extremas. Una experiencia similar no forma parte de mi calendario en un futuro.
Hambre, frío, calor? ¿Qué es lo peor?
-El problema que tienen durante los primeros días es hacerse con el entorno. La isla es difícil, no están los pantanos de agua dulce a la vista. El primer problema que han tenido es la mala gestión del agua, han tenido sed y han tenido problemas por digerir más agua de mar que la que debían. El agua de mar está muy bien, pero no puede ser la única fuente de hidratación, ni mucho menos.
¿Y la comida?
-Fíjate, no pienso que el ser humano lo pase tan mal con la comida. La isla tiene muchas frutas, muchos vegetales; proteínas no tienen. Las mayores dificultades vienen dadas por estar desprovistos de todas las comodidades y por la falta de agua dulce.
¿Hay muchas personas que quieren vivir una experiencia de este tipo?
-No solo se ha visto en el casting que había gente dispuesta, a mí me han llegado peticiones en directo, yendo en el AVE, una persona de las que te asisten en el viaje me preguntó qué había que hacer para vivir la experiencia, tiene efecto llamada. Seguro que para la próxima edición también habrá mucha gente dispuesta.
Una aventura para reflexionar, ¿no?
-Más allá del entretenimiento, hay cantidad de valores que se pueden extraer de una convivencia de este tipo. Es de lo que yo les hablé antes de dejarles en la isla. Una de las experiencias que sacas es el valor que hay que dar al trabajo en equipo, como tus habilidades las puedes poner al servicio de un grupo. Además, en este programa cuánto más ayudes la calidad de vida es mejor para todos.
¿Cuántas semanas ha estado en ‘La isla’?
-Cuatro y surgen también las valoraciones emocionales, te acuerdas de la familia, de los amigos y empiezas a dar valor a sentimientos que estando en el entorno habitual no das.
No llevan nada de su vida habitual pero supongo que a la vuelta se recupera con rapidez la vida cómoda de siempre, ¿o no?
-La capacidad de adaptación del ser humano es brutal. En cuanto vuelven a un entorno tecnológico y cómodo se adaptan y tienen de nuevo ganas de volver a su vida habitual. Pero también tienen muchas ganas de poder compartir todo lo que han vivido. No han tenido mucho trauma a la hora de volver.
Una ducha caliente, una cama cómoda y una buena comida seguro que no tienen precio.
-Lo que más les apetecía al salir de allí era una botella de agua fresca. Supongo que una ducha también. El tema de la comida lo han ido solucionando, dormir en una buena cama también les seducía mucho a la vuelta.
¿Hay previsión de segunda temporada?
-Pienso que el formato da de sí. Esta temporada solo ha sido de hombres. En otras ediciones de otros países, las segundas son solo de mujeres, incluso terceras ediciones mixtas, cuartas de famosos. Si la cadena está de acuerdo podríamos hacer una solo de mujeres.