gasteiz - Andoni Iruretagoiena (Aia Gipuzkoa, 1993) consiguió hacerse con la ikurriña de El conquistador del Fin del Mundo en una final en la que su triunfo le sorprendió hasta a él mismo. Confiesa que soñaba con ir a este concurso desde que cumplió 18 años y que fue elegido en el cuarto casting al que se presentaba. El 11 de abril, a mes y medio de la final, seis miembros de su equipo abandonaron el concurso por el miedo que pasaron ante un huracán y por no sentirse seguros. Él pidió disculpas a sus compañeros y decidió seguir: “El conquistador es peligroso, pero sabes a lo que vienes”, sentencia. La final de esta edición, emitida el lunes en ETB-2, ha sido la más vista y ha tenido una media de cuota de pantalla de casi un 20%.
Ganador en el último momento, ¿confiaba usted en la victoria?
-Nunca he tirado la toalla, no es mi estilo. Pero, si soy sincero, al principio, en la tirolina, lo veía muy difícil. No me lo esperaba, se me rompió el remo, luego la tirolina? no esperaba nada de lo que pasó.
¿Cuánto le ha costado guardar el secreto?
-Ha sido muy difícil. Uf, claro que me ha costado lo mío. No le dije nada a nadie, ni a mis padres, ni a la novia, ni a los amigos. No creas, son muchos meses guardándote dentro un secreto como ese y oyendo los comentarios sobre lo que se veía en la tele.
¿A qué se dedica?
-Trabajo en la sidrería, hacemos sidra, de camarero entre semana y haciendo chuletas en la parrilla los fines de semana.
¿Desde cuándo quería participar en este programa?
-Este era el cuarto año que me presentaba al casting. Es un programa que me volvía loco, estaba esperando a cumplir los 18 para poder presentarme. Esa dureza o saber hasta dónde puedo llegar hacía que quisiera llegar a probarme en El conquistador del Fin del Mundo. Todas las pruebas de sufrir me gustan mucho.
¿Le gusta sufrir?
-Sí, en el deporte sí, en otras cosas no. Me gustan los deportes duros, hay que darlo todo; un tío que en el deporte lo dé todo va a sufrir y eso me gusta. Veía mi cabeza allí.
Pertenecía al equipo rojo, el mismo que dejaron seis concursantes.
-Sí, hubo un huracán y ellos se fueron porque se sentían en peligro.
¿Usted no vio el peligro?
-Yo tenía claro que quería seguir, les pedí perdón a ellos y les dije que yo seguía en el Caribe. No estaba dispuesto a abandonar, cuestión de orgullo. Hice esa promesa, no abandonar, y la cumplí.
¿Se ha notado la falta de sus compañeros?
-Sí, por supuesto que se nota que seis personas se vayan. Pero yo estaba dispuesto a seguir, para eso había venido al concurso.
¿No le afectó el paso del huracán?
-Ese día no estaba en el campamento durmiendo. Pero también sufrí lluvias, tormentas?, pero se aguanta, ya sabes a lo que vienes. Sabes que es un programa duro y te van a llevar al límite, si lo asumes, lo llevas de otra manera.
¿Cuántos kilos ha adelgazado?
-14, llegué a casa con un tipín increíble.
¿Qué fue lo primero que le apetecía cuando todo acabó?
-Comer algo dulce, no sé por qué. Ni carne, ni pescado? algo dulce.
¿Goloso?
-Me gusta el chocolate, muy goloso no soy, pero eché de menos el azúcar.
Su novia se enteró el lunes que había ganado. ¿Qué le dijo?
-Se llevó una alegría, ella pensaba que era el penúltimo, no sé alguien le diría, yo no.
¡Qué poca confianza! ¿No se enfadó nada porque usted se había guardado el secreto?
-Creo que se alegró mucho, sobre todo porque pensaba que no iba a ganar. Sí que me dijo: Qué cabrón eres, qué cabrón?. Estaba muy contenta. Creo que entendió que yo no podía decir nada.
¿Nunca había vivido una experiencia de este tipo?
-¡Qué va! Tampoco hay muchas oportunidades como esta, es un concurso único, las experiencias de este tipo son muy difíciles de conseguir, en eso El conquistador del Fin del Mundo no tiene precio. Para mí ha sido increíble. Llevaba seis o siete años queriendo ir, he seguido los concursos y me parecían alucinantes.
¿No le dijeron nada en casa?
-Como me habían oído tantas veces que quería ir que lo habían asumido. Me dieron ánimos y me dijeron que fuera yo mismo, creo que eso también lo he conseguido, espero que estén orgullosos, aún no he tenido tiempo de hablar con ellos desde que se ha hecho público que el ganador soy yo.
Va a ser el más famoso de Aia.
-No me gusta el famoseo, no lo sé porque aún no he estado con nadie desde que se sabe que el ganador soy yo, ya veremos.
¿Le gusta su trabajo o prefiere uno más aventurero?
-Me gusta, durante la semana estoy en el campo cuidando los manzanos, luego estoy en la parrilla, estoy contento.
¿Le gusta comer?
-Demasiado creo yo.
¿Y qué tal llevaba el hambre en el Caribe?
-Eso era lo peor. En la tele parece que se pasa menos hambre, pero se pasa un hambre que no os podéis imaginar. Yo he sufrido mucho con la comida.
¿Algún percance?
-Los mosquitos al principio, luego tuve un esguince, pero hay buenos médicos y se me curó enseguida.
Así que peligro no corren ustedes.
-Sí que se corre peligro, el programa llega a ser muy extremo.
¿Volvería?
-Por supuesto, hay peligro, pero sabes a lo que vas. Todos hemos visto el programa y sabemos a qué vamos, a sufrir un poco.