madrid - Ganar un campeonato de ping pong hizo que la radio entrara en su vida a los 14 años y desde entonces no se ha marchado. Luis del Olmo asegura que medio siglo haciendo radio ha merecido la pena. A sus 78 años, reconoce que si en sus inicios en la radio le hubieran dicho que hoy en día podría escuchar 50.000 emisoras a través de un móvil, no se hubiera creído ese “sueño”.

Medio siglo en las ondas, 12.000 emisiones de ‘Protagonistas’, mucho tiempo para cualquiera ¿se le ha hecho corto?

-Se me ha pasado en un suspiro. Ahora, cuando echo un vistazo a alguna de las grabaciones o de los recortes de prensa pienso que no es posible que hayan pasado 50 años. Pero creo que ha merecido la pena y volvería a repetir con todos los aciertos y con todos los errores, que algunos he tenido.

¿Recuerda la primera vez que se puso delante de un micrófono?

-Sí, la primera vez fue una entrevista que me hizo un compañero en Radio Ponferrada porque había quedado campeón entre los jóvenes bercianos para ir a disputar un trofeo de ping pong en la capital. Debería tener 14 o 15 años y ahí fue la primera vez que entré a una emisora de radio, donde vi un micrófono, donde conocí el ambiente y donde llamé a mis compañeros y a mi familia para que me escucharan porque me iban a hacer una entrevista en la emisora local.

¿Cómo le da a un niño de 14 años por hacer radio? ¿Había pensado alguna vez en dedicarse a ello?

-No, no había pensado nunca. Lo que ocurrió es que tuve la fortuna de que un día aterrizó en Ponferrada el director del diario Región -que se editó en Asturias-, le gustó mi voz y habló con mis padres, que se oponían a que me fuera a Oviedo para trabajar en Radio Asturias, y los convenció. Al principio se resistían porque pensaban que era una profesión de folclore y de poco fuste, pero al final aquello salió bien. A Radio Asturias me vino a buscar el director de La Voz de León y de allí me fui a Madrid, donde empecé una profesión en serio. En RNE y en Radio Intercontinental había concurso-oposición, me presenté a las dos y gané ambas plazas. Hasta que un buen día Jorge Arandes, director de RNE en Barcelona, me hace una oferta para suplir a Soler Serrano.

‘Protagonistas’ ha sido el programa más veterano de la radio generalista en España, emitido durante 44 años y pionero en muchos aspectos. ¿Cómo era y cómo es la radio hoy? ¿Qué se ha ganado y qué se ha perdido?

-Entonces, con la dictadura, teníamos que pasar el visto bueno del jefe de programas y del director de la emisora local. Nosotros no nos dábamos cuenta porque no conocíamos otra cosa, pero antes de hacer un comentario o una entrevista tenías que consultarlo. Cuando termina la dictadura y estrenamos la democracia, también estrenamos libertades, y con esa libertad el responsable de los programas hacía lo que creía que era mejor para los oyentes. Aquella experiencia hoy la recuerdas con pena. Efectivamente, la radio experimenta un cambio a favor y hoy es el medio más formidable por su inmediatez y porque puedes estar sintonizando desde el último rincón del planeta. No hay fronteras, si hace 50 años me hubieran dicho que hoy existiría la posibilidad de escuchar 50.000 emisoras a través de un pequeño aparato, no me hubiera creído ese sueño.

¿Cuál es el secreto de la radio para que enganche a todo el que la prueba?

-Pues que el presentador piense en los oyentes y no en si mismo, que piense en lo que acompaña, entretiene y divierte. A partir de ahí, la radio es imbatible. La calentura que tiene el medio radio en este momento no la tiene ningún otro. Cuando se comentó aquello de que llegaba la tele y la radio podía recibir un varapalo tremendo, la radio despertó de su letargo e hizo frente al coloso de la televisión y hoy en día muchos millones de oyentes sintonizan las emisoras.

A lo largo de su trayectoria, tanto usted como ‘Protagonistas’ han recibido multitud de premios y reconocimiento. A sus 78 años, ¿mira para atrás y se pregunta si ha merecido la pena? ¿Ha hecho todo lo que ha querido en la radio?

-Tú lo has dicho, a partir de la democracia, he hecho lo que he querido en la radio, lo que creía que era bueno no sólo para mí, sino para los oyentes. No he tenido ninguna cortapisa para trasladarme a Pekín y hacer desde allí un programa a través de la Radio Nacional China o a través de Radio Moscú, hace treinta y tantos años. He viajado a todas las ciudades, he bajado a la mina a 300 metros de profundidad, he hecho el programa desde el puente aéreo, desde alta mar. Todos los sueños que podía tener un enamorado de la radio, todos, se han ido cumpliendo. Por eso ahora, cuando recuerdo el tiempo pasado, vuelvo a disfrutar escuchando las cintas o viendo los reportajes fotográficos que me hacían. Ha merecido la pena, volvería a repetir, con los errores, porque algunos habré cometido, pero ha merecido la pena y volvería a hacer exactamente lo mismo que he hecho.

El 13 de diciembre de 2013 anunció su marcha. ¿Le dio muchas vueltas a su retirada? ¿Se arrepiente?

-No. De pronto me di cuenta, echando un vistazo al carné de identidad, que acabo de cumplir 78 años, y que esa es una edad muy buena para pensar en serio que tienes que dar paso a los compañeros que están empujando a los Carlos Herrera, a los Pepa Bueno, a los Carlos Alsina, a los Alfredo Menéndez, a Julia Otero, a Jordi Basté... Compañeros que en tantas emisoras están haciendo una radio fantástica, una radio increíble y una radio muy importante en este momento que estamos viviendo en España, que no es fácil. Lo cuenta la radio, lo dice la radio, informa la radio.

Usted ha vivido el esplendor del periodismo en España. ¿Qué hacemos mal los periodistas para que los ciudadanos tengan tan mala opinión de nosotros, según refleja el CIS?

-Es que no me creo esas encuestas, no me creo que la gente le pegue esos varapalos a los medios de comunicación. Pienso que la gente en general cree en los medios, y me refiero a la prensa, la radio, la televisión. La gente se asoma a la palabra escrita, a la palabra a través de la radio o a la palabra y la imagen a través de la televisión. Creo que lo poco creíble que hay en este momento son los medios de comunicación.

¿Qué hay del proyecto de viajar por España junto a Iñaki Gabilondo contando sus vivencias en la radio y su visión de la España más reciente?

-Hablamos de vez en cuando de ese proyecto, pero al final, tanto Iñaki como yo tenemos otras ofertas para desplazarnos a cualquier rincón de España para contar nuestra vida y no nos da tiempo de madurar esa idea. No te digo que algún día la llevemos a cabo, pero de momento no.