PARÍS. En una entrevista, Molia ha reconocido no tener pruebas concretas de esta cooperación, que es el eje central de la producción de 90 minutos, dirigida por el belga Olivier Masset-Depasse.
Un estrecho colaborador del presidente francés de la época, François Mitterrand, entra en contacto con un dirigente de ETA para establecer una negociación, pero las cosas son más complicadas que la buena voluntad de los protagonistas y "la acción entra en una lucha geopolítica", ha relatado Molia.
El guionista, nacido en Baiona, retrata cómo los GAL intentaron crear un clima de terror en torno a los santuarios de la banda terrorista ETA en Francia y estigmatizar al movimiento nacionalista en su conjunto.
En esa labor "los servicios antiterroristas franceses colaboraron dando información a los españoles que pudo llegar hasta los GAL", ha asegurado Molia, que coescribió el guion junto a Masset-Depasse y Pierre Erwan Guillaume.
En la ficción aparecen policías españoles que tratan de corromper a colegas franceses, aunque no llega muy arriba en la cadena de responsabilidades "por falta de pruebas concretas y por miedo a una demanda".
Molia se ha documentado para preparar el telefilme y ha hablado con políticos, policías, víctimas de los GAL, militantes independentistas y consejeros de Mitterrand.
"El objetivo era reconstruir lo más fielmente posible la época, partiendo de la base de que en una ficción hay que sintetizar mucho. Pero hemos querido inventar lo menos posible", ha indicado.
"Sanctuaire" será pronto estrenada en España y Molia no tiene duda de que será "muy polémica".
La película, rodada en su mayor parte en Euskadi, cuenta con parte del reparto español, como Alex Brendemühl, Rubén Ochandiano o Josean Bengoetxea, además de la colombiana Juana Acosta.
"Muchos de ellos nos decían que la sociedad española ya estaba preparada para este tipo de películas, para no mostrar las cosas como si fuera una caricatura", ha señalado.
Originario de una "familia conservadora", según su propio relato, Molia reconoce haber cambiado su visión de las cosas al preparar la película.
Recuerda que de niño vivió en su Baiona natal asesinatos de los GAL, lo que creó "un clima de terror" que, ahora, sabe que era voluntariamente alimentado por este grupo.
"Tengo que confesar que me ha sacudido la fuerza del sentimiento independentista. Ahora le reconozco una legitimidad que antes no le otorgaba", ha señalado.