BILBAO. De dicho informe también se desprende que se ha producido una reducción en la brecha tecnológica entre menores ricos y pobres en los últimos cuatro años, ya que en 2010 los niños que utilizaban teléfonos inteligentes vivían en entornos "privilegiados" mientras que en 2014 han llegado a todas las capas sociales.
Entre los menores de más edad -de 13 a 16 años- el uso de móviles con acceso a internet es mayoritario, según ha informado la Universidad del País Vasco (UPV/EHU).
La directora de este proyecto, la investigadora de la citada universidad Maialen Garmendia, ha concluido que los niños que acceden a internet a través del móvil "experimentan más riesgos" que los que usan un teléfono más antiguo o conectan con internet desde un PC u ordenador portátil.
El riesgo añadido consiste en la posibilidad de localización por GPS y el hecho de que existen aplicaciones que pueden conectar a los usuarios de móviles con personas desconocidas.
Los menores con teléfonos inteligentes también acceden más frecuentemente a internet y desarrollan una gama más amplia de actividades.
La recomendación a los padres es "implicarse y regular activamente el uso que hacen sus hijos" de estos móviles, y, en un plano más general, también se recomienda que los diseñadores de software, las compañías tecnológicas y las de comunicación den prioridad al desarrollo de herramientas que permitan mecanismos sencillos de control para los progenitores.
El proyecto europeo EU Kinds Online estudia las oportunidades y riesgos de internet para los menores a través de una encuesta realizada sobre más de 25.000 niños de veinticinco países.