vitoria. Una combinación de distintos géneros de humor en un mismo formato es la propuesta de Esposados, programa en clave de comedia que Telecinco estrena el domingo y que tendrá como eje argumental las relaciones sentimentales de tres parejas de distintas edades como protagonistas.
A estas alturas no estará nervioso por el estreno...
Hombre, lo justo. Siempre hay unos pocos nervios.
¿Cómo es Diego, su personaje en este espacio?
Es un cuarentón típico/tópico, un poco cansado de lo que es el matrimonio pero que no puede vivir sin su pareja, Yolanda, que interpreta Pepa Charro. Vivimos situaciones disparatadas, basadas en cosas que nos suenan familiares a todos pero muy exageradas. Yo diría que es un poco sinsorgo y futbolero, sobre todo si implica estar sentado en el sofá con una cervecita; es más bien comodón.
¿Este título con doble sentido recoge bien el contenido del programa?
Sí, sobre todo en el caso de la pareja de mediana edad, que es la mía, y de los mayores. Refleja la sensación de estar casados y un poco encadenados. Nosotros nos sentiríamos muy solos sin la pareja, pero llegamos al hastío cuando no nos la podemos quitar de encima.
Está casado en la vida real. ¿Le han hecho alguna advertencia en casa?
Ja, ja, ja. Afortunadamente ella sabe distinguir muy bien entre realidad y ficción.
¿No tiene miedo de que se le pegue algo del sinsorgo de Diego?
No, creo que estamos vacunados. Esta semana es nuestro noveno aniversario de boda (se ríe).
¿Por qué habrán pensado en usted?
Hombre..., físico de deportista no tengo y he hecho otros papeles que han podido dar pistas sobre mi encaje en el personaje de Diego, aunque seguramente soy más activo de lo que la gente piensa.
¿Ha sido mucho agobio compaginar las grabaciones de 'Irrikitown' para ETB y 'Esposados' para Telecinco?
Los últimos meses he tenido una carga de trabajo importante, pero desde que salí de Vaya Semanita había flojeado bastante. Estos altibajos son lo más habitual en la trayectoria de un actor. La vida está difícil para todos, para nosotros también; aunque de esta racha no me puedo quejar en absoluto. Estoy muy contento con los trabajos que he hecho para ETB y Esposados va a ser introducirme un poco en el mundo Madrid, y a ver cómo va. Han sido viajes continuos y a veces me despertaba y los primeros segundos no tenía muy claro dónde estaba, pero creo que ha merecido la pena.
¿Qué le ha parecido el salto?
La experiencia me ha gustado, siempre había oído que había un ritmo de trabajo bastante alto, pero viniendo de Vaya Semanita ya estaba acostumbrado y no me costó adaptarme. Todo han sido atenciones y facilidades y Pepa Charro es una compañera ideal. Espero que podamos grabar más cosas juntos.
En 'Esposados' hay algunas diferencias con 'Escenas de matrimonio'...
Sí, a veces se sustituirá a alguna de las parejas fijas por cameos de gente conocida y algún famoso o monologuista hará las veces de presentador para introducir los sketchs. Supongo que se pretende dar un giro al formato ya conocido de las matrimoniadas.
¿Le preocupa que solo Aizpea Goenaga ('Zeru horiek') le llamara para un papel dramático?
Me toca comedia pero no me traumatiza, simplemente me gustaría que alguien me ofreciera drama porque es un reto más y me gustaría demostrar que soy capaz de hacerlo.
También ha hecho cosas como dar las campanadas o ir a 'El conquistador del Aconcagua'...
No creo que mucha gente apostara por verme en este reality. Eso ya era un reto personal y no estoy frustrado por cómo me desenvolví allí.
¿Cómo está el sector cultural?
Seguramente lo que peor está es el teatro, pero por otra parte es más fácil que un actor se autogestione y autoproduzca. Todos lo estamos pasando mal. Parece que quien decide cómo tiene que ser el reparto cree que la cultura es prescindible en épocas de crisis.