Vitoria. Ana Morgade es una comediante nata. Le gusta hacer reír y sabe que requiere "una técnica compleja, es pura matemática". También cree que la crisis "es un gran momento para hacer comedia".

En 'Frikiliks', usted interpreta a @Beibe81. ¿En su vida personal también le gusta ir de incógnito?

(ja,ja,ja) Depende de las redes, durante un tiempo estuve en Facebook y tenía un nombre secreto, porque era más cómodo, pero no soy muy diestra en el tema de los chats. En Twitter utilizo mi nombre y estoy encantada.

¿Conoce 'frikilocos'?

Sin parar. Al final es muy difícil no ser un friki porque internet está en todos lados, lo tienes en todos los dispositivos y muy a mano.

El programa dice que "recoge los mejores momentos de la actualidad televisiva y de internet".

Lo difícil es seleccionar entre la gran cantidad de vídeos y de minutos audiovisuales que se están volcando todos los días a través de internet, las redes y la tele. Pero no es un simple programa de zapping porque lo que intentamos no es recoger lo que pasa, sino crear material nuevo. Se mezcla, se edita, se dobla... y sale un material nuevo. Es un punto de vista creativo sobre la tele.

¿Su relación con @Frikiloco va a dar mucho juego?

Tenemos una relación que en realidad es bastante cotidiana. Hay mogollón de gente que no se conoce de nada y se maneja por internet con un nivel de intimidad y con unos vínculos afectivos superintensos. Estas dos personas no se han visto nunca en su vida y probablemente no lo harán. Y si se vieran probablemente alucinarían porque siempre se han visto a través de la pantallita, de cuello para arriba. A lo mejor nunca te das cuenta de que el otro es superbajito o muy alto, o cómo huele.

¿Usted es una fanática de la tecnología?

Entré en Twitter un poco de rebote y estoy enloquecida, es lo que más me gusta. Es como los muros de corcho gigante donde la gente pinchaba antes sus anuncios. Además es como muy democrático, todo el mundo puede poner muchas cosas, y para cuestiones de actualidad es muy divertido el seguimiento minuto a minuto de cualquier evento. También soy maricacharritos, siempre me ha gustado el tema de la tecnología y me meto en internet durante horas.

Con este programa regresa a Cuatro, donde ya ha buscado la carcajada del público en otras ocasiones.

A mí me gusta mucho hacer reír, es una cosa de la que espero no cansarme. Volver a Cuatro es una buena noticia para mí, es la cadena en la que empecé.

¿Las cadenas ponen espacios de humor después de las noticias para levantar el ánimo de la audiencia?

Es que la cosa está muy mal. Si no nos reímos, ¿qué vamos a hacer? En los momentos de crisis aparece el humor. Cuando la cosa está complicada, el humor se convierte en un arma de combate y eso es interesante. No solo mola reírse, mola reírse de cosas importantes.

Enfrente tiene rivales como 'El hormiguero' y 'El intermedio'. ¿Es una franja muy dura?

Sí, pero todas lo son. Es verdad que estos son dos castillos de audiencia y de calidad pero hay tantas cadenas que no queda franja suave. Es superdifícil encontrar un nicho ahora mismo.

Bueno, usted en concreto ha encontrado muchos porque además de en Cuatro ha estado en TVE, en Neox y en La Sexta, donde sí que dio la campanada...

Sí (se ríe), un par de años seguidos me tocó pringar.

¿'Pringar'? ¡Eso da estatus de estrella!

Es pringar a lo grande pero no deja de ser pringar. Todo el mundo preparándose para la fiesta y tú preparándote para hacer un programa... Es un dudoso honor pero hay que hacerlo y lo pasé fenomenal, fue un mano a mano con Berto y estábamos como en casa.

Hasta hace unos meses colaboraba con 'Buenafuente'. ¿Desde que Andreu se fue a pensar a usted se le ha ocurrido algo?

Nada más acabar el programa empecé a perfilar estos dos proyectos y he ido haciendo cosas de teatro. Tuve unas vacaciones muy intensas y después cogí carrerilla.

¿No se agobió?

Hombre, da algo de vértigo dejar a esa especie de familia política a la que ves todas las mañanas. El día que se acabó Buenafuente me dio un vuelco el corazón. Además, este mundo es tan inestable que igual no te vuelve a llamar nadie nunca.

Pues hará doblete en Cuatro cuando estrene 'Las noticias de las 2', con Silvia Abril como compañera...

Estoy encantada. Con lo complicado que está conseguir trabajo, que a mí me falte tiempo es un placer.

¿Cómo será? ¿Cuándo empieza?

Queremos hacer un programa con formato de infoshow, basándonos en espacios americanos como el Saturday Night Live, los programas de Stephen Colbert o de Tina Fey. Teniendo en cuenta que intentamos utilizar la actualidad para meter caña, ¡si pudiéramos empezar antes de las elecciones sería estupendo!

¿Por qué no triunfan las comedias en nuestras televisiones?

Se juntan dos cosas: que la rotación de programas es más rápida y que es muy difícil hacer humor. Hay un nivel de crispación muy alto y la gente se ofende enseguida. Creo que la comedia sufre esa susceptibilidad que hay por cómo está todo. Hay una indignación estéril que es puro cansancio. Además, hacer reír es una técnica compleja, pura matemática.