WASHINGTON. Los accionistas que asistan hoy a la junta anual que Apple celebra en Cupertino (California) aprovecharán para indagar sobre la salud del cofundador de la compañía, Steve Jobs, y exigir que se revelen los planes de sucesión, según informa la prensa especializada.

Jobs, que el 17 de enero anunció que se ausentaría un tiempo de sus funciones debido a problemas de salud, no ha confirmado su asistencia a la junta de accionistas, que estará encabezada previsiblemente por su jefe de operaciones, Tim Cook, informó hoy la publicación "San Francisco Weekly".

La baja médica de Jobs, que ya se ausentó un tiempo en 2004 debido a un cáncer de páncreas y en 2009 por un nuevo tumor, ha dejado pocas esperanzas a los accionistas de que el principal ejecutivo de la compañía vuelva a ocupar su puesto, sobre todo porque no ha anunciado una fecha aproximada para su regreso.

Esta incertidumbre ha aumentado la presión para que la compañía revele sus planes de sucesión en caso de que el visionario empresario no pueda volver a sus funciones, una idea que inquieta a muchos dada la alta implicación del cofundador en exitosos proyectos como los reproductores iPod o el teléfono iPhone.

"Los accionistas merecen saber si la compañía tiene un plan en mente", indicó la directora adjunta de asuntos corporativos de la Unión Internacional de Trabajadores de Norteamérica, Jennifer O'Dell.

Ese sindicato respalda una resolución que los accionistas tienen previsto someter hoy a votación y que exige a los altos cargos de la compañía que revelen los planes para una posible sucesión de Jobs y aclaren las dudas sobre la jerarquía directiva.

Apple, por su parte, considera que divulgar los planes secretos podría suponer un impulso para la competencia y perjudicar la permanencia de sus propios ejecutivos, según fuentes cercanas a la compañía.

Según los expertos, sin embargo, el nombramiento de Cook, de 48 años, como director de operaciones en ausencia de Jobs le ha convertido en el mejor posicionado para sucederle de forma permanente, aunque en esa carrera también suenan otros nombres, como el del vicepresidente de mercadotecnia global, Philip Schiller.

Jobs fue fotografiado la semana pasada a la salida del centro médico para enfermos de cáncer Stanford Cancer Center situado en Palo Alto, donde recibió tratamiento el fallecido actor Patrick Swayze, lo que hizo saltar las alarmas ante la posibilidad de que el consejero delegado padezca un nuevo tumor.