El Partido Socialdemócrata de Suecia (PSS) de la primera ministra Magdalena Andersson ha sido el más votado en las elecciones legislativas celebradas este domingo con un 30,4 por ciento de votos, con lo que previsiblemente podrá seguir gobernando, según los resultados oficiales aún parciales correspondientes al 59,22 por ciento de las mesas que ya han sido escrutadas.

En segunda posición se confirma la presencia del partido de extrema derecha Demócratas Suecos (DS) con un 20,7 por ciento de los votos, mientras que el Partido Moderado (PM) se quedaría con un 18,8 por ciento de apoyo. Los socialdemócratas mejorarían un punto sus resultados con respecto a las últimas elecciones, mientras que los Demócratas Suecos crecen tres puntos y los moderados caen uno.

En cuarta posición estaría el Partido de la Izquierda (PI, 6,9 por ciento), seguido del Partido del Centro (PC, 6,7 por ciento), el Partido Cristiano Demócrata de Suecia (PCDS, 5,4 por ciento), el Partido Verde (PV, 5,1 por ciento), y el Partido Liberal de Suecia (PLS, 4,6 por ciento).

Estos datos confirman lo que pronosticaban las encuesta a pie de urna, por lo que el PSS podrá gobernar con un acuerdo de coalición o con apoyos puntuales en el Parlamento del Partido Verde, el Partido de Centro y el Partido de Izquierda. Sin embargo, estos dos últimos están muy lejos en cuestiones como los presupuestos.

La opción de la derecha parece más lejana que nunca, puesto que aunque la suma alcanzara para gobernar, el difícil imaginar un ejecutivo liderado por el Partido Moderado cuando la ultraderecha le ha superado claramente en votos.

La tercera opción sería una gran coalición al estilo alemán con el PSS y el Partido Moderado, pero parece poco probable dado los precedentes de enfrentamientos y rivalidad entre ambas formaciones. Esta vía solo se exploraría si las demás opciones fallan.