El Gobierno francés recién formado afronta hoy una moción de censura por parte de la izquierda que, aunque no tiene posibilidades de salir adelante, busca mantener la iniciativa política y posicionarse en el liderazgo de la oposición, por encima de la derecha tradicional y la extrema derecha.
La moción fue presentada por separado por los cuatro grupos parlamentarios que constituyen la coalición Nupes (el radical de la Francia Insumisa –LFI– liderada por Mélenchon, además de socialistas, comunistas y ecologistas), que suman 151 de los 577 escaños que conforman la Asamblea Nacional francesa.
Con el Gobierno apoyado por una mayoría relativa de 266 diputados, la moción necesitaría el apoyo de la ultraderechista Agrupación Nacional (89) –de Marine Le Pen– y del conservador Los Republicanos (LR, 62) para alcanzar la necesaria mayoría absoluta de 289 votos favorables, pero ambas formaciones ya han advertido de que no van a secundar esta iniciativa.
“Nupes no defiende a los franceses, quiere hacer salta la República”, reprochó ayer la líder ultraderechista, Marine Le Pen, en una entrevista en el canal BFM para justificar la negativa de su grupo.
La coalición izquierdista justificó su iniciativa en motivos de legitimidad democrática, ya que la primera ministra, Élisabeth Borne, rechazó someterse a una moción de confianza durante su discurso de inicio de legislatura de la pasada semana ante el Parlamento.
Papel de Nupes
Sin embargo, varios analistas políticos coinciden en señalar que Nupes busca arrogarse el papel de principal eje de la oposición al Gobierno del presidente Emmanuel Macron frente a RN, que tiene más diputados que cualquiera de los grupos izquierdistas por separado.
“La moción no tendrá éxito porque Nupes no tiene la mayoría” en la Asamblea Nacional, recordó de forma concisa el ministro portavoz, Olivier Véran, en una entrevista en el canal informativo LCI.
Recalcó que en las últimas elecciones presidenciales y legislativas de abril y junio el proyecto de Macron ganó en las cuatro vueltas, mientras que LFI y su líder, Jean-Luc Mélenchon, las perdieron todas.
Véran apuntó a que la discusión y voto de la moción de censura supondrá un retraso en el debate parlamentario de las medidas que el Gobierno aprobó la pasada semana para ayudar a los ciudadanos más afectados por la subida de la inflación de los últimos meses.
También aseguró que no hay planes para disolver la Asamblea y convocar elecciones anticipadas, ya que el Gobierno considera que hay opciones para forjar pactos, sea con los conservadores como con algunos miembros de Nupes, donde hay “diferentes sensibilidades”, señaló en referencia a socialistas y ecologistas.
Llamamiento de Borne
El pasado miércoles, Elisabeth Borne presentó su discurso de política general ante la Asamblea Nacional. La primera ministra, para quien “el desorden y la inestabilidad no son opciones”, llamó a los grupos opositores a construir “compromisos” en el hemiciclo.
En su intervención, Borne descartó someterse a una moción de confianza de la Asamblea.
En corto
Dos horas. El debate de la moción comenzará a las 16.00 horas (14.00 GMT) y se extenderá durante unas dos horas y media aproximadamente.
Sin opciones. Con el Gobierno apoyado por una mayoría relativa de 266 diputados, la moción necesitaría el apoyo de la ultraderechista Agrupación Nacional (89) y del conservador Los Republicanos (LR, 62) para alcanzar la necesaria mayoría absoluta de 289 votos favorables.
Contra Nupes. Marine Le Pen, líder de la extrema derecha francesa, cargó ayer contra la coalición de izquierda Nupes. “Nupes no defiende a los franceses, quiere hacer salta la República”, reprochó.
Posición de Borne. La primera ministra gala llama a los grupos opositores a construir “compromisos” en el hemiciclo, pero dejó claro que no se iba a someter a una moción de confianza.
