- El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, anunció ayer un plan que pretende disminuir la importación de energía rusa e invitó a sus socios europeos a hacer lo mismo. En una conferencia de prensa desde la central energética de Mosciwska, Morawiecki calificó el programa como “el más radical de Europa” y dijo que es “necesario para eliminar las herramientas de chantaje de Putin y Rusia”.

La principal medida, cancelar las importaciones de carbón ruso, se adoptará, según el primer ministro, “en abril, a más tardar en mayo”, aunque no haya consentimiento de la Unión Europea (UE). Asimismo, afirmó que su gobierno tiene la intención de abandonar las importaciones de petróleo de Rusia “a finales de año” y sustituirlas por crudo comprado a Estados Unidos, Arabia Saudí y Nigeria, entre otros países.

En cuanto al gas, Morawiecki aseguró que Polonia dejará de recibir suministros rusos también al final de 2022, cuando expire el contrato que Varsovia mantiene actualmente con la empresa estatal rusa Gazprom y cuya renovación no se llevará a cabo.

En sus declaraciones, el jefe del Gobierno polaco aludió a Alemania en varias ocasiones, y afirmó que “mientras otros veían a Rusia como un socio comercial, nosotros ya éramos conscientes de que para Moscú el gas sería un instrumento de chantaje”. “Hoy el vicecanciller alemán admite que esa dependencia de Rusia fue inapropiada y estúpida. Debemos enfrentar la realidad con seriedad”, declaró Morawiecki.

Por otro lado, el mandatario polaco apeló a la Comisión Europea “para que establezca un impuesto sobre los hidrocarburos rusos”, pues, según él, “no se puede repetir esa política criminal que le entregó petrodólares a Rusia para construir su arsenal de guerra y atacar a sus vecinos”. “Hoy estamos despertando de una siesta geopolítica”, concluyó Morawiecki.

En el primer trimestre de 2021 Polonia importó 6,2 millones de toneladas de carbón, de las cuales cuatro venían de Rusia.