Al menos veintidós personas fueron detenidas y decenas de individuos resultaron heridos tras la intervención policial para desalojar el jueves una explanada del parque bruselense Bois de la Cambre ante la presencia de miles de asistentes convocados al festival falso 'La Boum', que no había sido autorizado.
Según indicó una portavoz de la Policía de Bruselas a la agencia Belga, al menos veintiséis agentes y ocho participantes resultaron heridos en la intervención. También hubo daños para ocho caballos de la Policía.
Algunos de los asistentes al evento falso lanzaron botellas a los policías y uno de los agentes tuvo que ser trasladado al hospital, pero su vida no corre peligro.
Entre los manifestantes, al menos dos heridos leves fueron trasladados a centros hospitalarios.
Sin embargo, la agencia Belga precisó que no todas las lesiones se debieron a la intervención policial y que uno de los afectados fue golpeado por una barra de hierro lanzada por otro asistente.
También sufrieron daños materiales algunos vehículos policiales.
La Policía estima que entre 1.500 y 2.000 personas se habían concentrado en el parque en la tarde del jueves, lo que va en contra de las medidas en vigor en Bélgica para contener la pandemia del coronavirus.
La Policía había anunciado un refuerzo de su presencia este jueves en el parque Bois de la Cambre después de que a través de redes sociales se convocase el festival "La Boum", al sospechar que algunas de las alrededor de 18.000 personas que habían indicado en Facebook acudirían al festival o de las 51.000 que habían manifestado interés en el acontecimiento se pudieran congregar en el parque.
"La actividad 'La Boum' (...) es una noticia falsa del Día de los Inocentes (que en Bélgica y otros países tiene lugar el 1 de abril) y, por tanto, no se llevará a cabo. No se ha dado autorización para un posible festival y la Policía reforzará su presencia allí", habían advertido las fuerzas de seguridad de Bruselas-Ixelles en su perfil de Twitter.
En una entrevista al diario "La Libre Belgique", los presuntos organizadores, enmascarados, se presentaban como representantes de un colectivo de artistas y "librepensadores", y, empleando la conocida obra del pintor surrealista René Magritte que muestra una pipa con el lema "esto no es una pipa", aseguraban que "esto no es un festival", al tiempo que anunciaban más iniciativas en el futuro.
Sin embargo, en Facebook se indicaba que el evento comenzaría el jueves a las 18:00 horas (16:00 GMT) y terminaría el viernes a las 7:00 (5:00 GMT), aunque más tarde se cambió la fecha a los mismos días, pero de 2022.
El presunto festival estaba previsto justo un día después de que un tribunal de primera instancia ordenara al Gobierno federal de Bélgica poner fin a todas las medidas excepcionales adoptadas contra la pandemia del coronavirus en un plazo máximo de 30 días al considerarlas ilegales.
El Ejecutivo ya ha anunciado que recurrirá la sentencia.
Para tratar de identificar a los organizadores de esta cita en el parque Bois de la Cambre y de otra prevista para este viernes en el mismo lugar la Fiscalía de Bruselas abrió el miércoles una investigación.
Según pudo comprobar Efe en el parque, la Policía empleó un dron para advertir a los asistentes de que se enfrentaban a multas o detenciones por congregarse en grupos numerosos, se organizó para desalojar este área de uno de los parques más grandes de la capital belga y recurrió a agentes a caballo, gases lacrimógenos y un camión lanza agua para evacuar a algunos grupos reticentes a marcharse.